header-photo

La Peregrinación Salvaje De Stroll Northwood. Una Distopía Flâneur En Las Trazas De La Psicogeografía.

El frío nórdico es leyenda. Le Main afirmó en Yardley Gobion que el frío puede tener valores morales. Le creímos. Sólo tres regresamos a Galiza. Y no podemos contar lo que pasó. Pero podemos vengarnos. En la sociedad postmoderna, la tribu es el medio hooligan de comunicación, la pantalla para comunicarnos con este mundo agonizante y combatir la basura de albañal que nos amenaza. Por tanto, debemos convertirnos en minoría étnica con conciencia de sí misma, y luego seremos una minoría cultural. Se globalizarán los objetos, los ordenadores, los móviles, las putas redes sociales, los programas de la tele, y demás embudos de pastoreo ideológico. Pero nosotros, en cambio, nos tribalizaremos en las aceras y en los pubs. Seremos tribu. La tribu es la posibilidad, es una estética y un destino en lo bestial. Lo folk inviste lo urbano desde adentro y le vuela la cabeza.

Los calendarios de los antiguos nórdicos eran nocturnos: contaban el tiempo por noches. Ellos eran sabios. Nosotros pagaremos gustosos nuestras cuotas de sangre, gelidez y oscuridad. El hombre moderno está buscando ahora un alma, en un viaje introspectivo, ante su naturaleza neurótica y dividida. Odio eterno a ese hombre blandengue y al fútbol moderno.

Cada distancia tiene su silencio.

Trafagar por la ciudad. Pasar cerca de un cementerio, cruzar un puente. Olvidarse de contar concellos o de medir cantidades de cerveza. Ser un enunciatario lúdico. Un arrogante privilegiado encantado de conocerse. Y de repente, un flâneur engendra una criatura ctónica en el burdel de la psicogeografía. Tanto ocio acarrea vicio. El tráfago en las ciudades brumosas es un vasto depósito de historias que pueden ser leídas como un mal libro si se afronta con la conducta apropiada; como esos sueños colectivos cuyo contenido latente no se debe descifrar. Y así nace otro mito del folclore anglogalicioso.

Escenario: Ciudades galegas o británicas que tengan entre 25.000 y 460.000 habitantes.
Duración: Comprendida de sol a sol. De orto a ocaso.
Distancia: 13 kilómetros mínimo de displicente paseo. Nada de emplear bestias mecánicas.
Abrevaderos: Con 8 basta. Pero pueden y deben ser más. Mejor que sea la primera vez.
Brebajes: Alcohólicos de cualquier pelaje. Sin más especificación.
Imprescindible: Alcanzar al menos una de las fronteras donde muere la ciudad.
Número: 1 es soledad y 3 es vicio.
Obligatoriedad: Un Porco Bravo debe praticar el Weer Balking. Esto es sólo optativo.
Denominación de orina: Stroll Northwood.

No hay erección en los residuos de la ira. Este nuevo vagar no fue abrasado por un viento, no fue raído por un rebaño.
Cada distancia tiene su descanso.


Permitámosle a Stroll Northwood que comience a vagar no más nacer, y a regresar no más partir. Démosle fecundos días, poblados de anécdotas, amores fugaces, camaradas, fuego y sed. Y que nos devuelva una traza de la infancia, y con ella el bello rostro de la eterna nostalgia. Toda vuelta a casa es otra creación del mundo.

Donde acaban todas las calles, el camino de un Porco Bravo nunca termina.

324 comentarios:

«A máis antiga   ‹Máis antiga   1 – 200 de 324   Máis recente ›   A máis nova»
  1. Andar por los puertos es una de la formas de pereza que enriquece más dixo...
  2. Signos rúnicos. Algo del más allá, algo demónico, tabuizado o prohibido: Necromacia en las tumbas de los vikingos.
    La entrada está en construcción pero ustedes lo están aún más.

  3. Final feliz dixo...
  4. Esta entrada no va a terminar bien.

  5. un blanco adinerado que estudia o ha estudiado en una universidad de élite y que trabaja en sectores culturales tendentes a la endogamia, como la academia, el periodismo, el cine o el mundo editorial y que se odia a si mismo dixo...
  6. Nadie se define como woke: el woke es siempre el otro. Por eso es imposible encontrar a un woke, porque el mero hecho de buscarlo supone aceptar el marco que presupone su existencia. Uno describe a alguien como woke para atacarlo como una caricatura de las tendencias más problemáticas y radicales del pensamiento progresista. Pero eso no quiere decir que no exista, pues es una palabra que, como tantas otras palabras, crea realidades al nombrarlas.

  7. Súper Elon Musk contra el imperio woke dixo...
  8. Declarada animadversión hacia la dictadura woke: el "pensamiento" único impulsado desde sectores de izquierda que ven el mundo exclusivamente en clave de desigualdades sociales y ha derivado en un fundamentalismo identitario según el cual el negro es superior al blanco, la mujer al hombre —y esto ya se les dice a los chavales en los institutos: «las chicas son mejores que vosotros»—, el crisol LGBTIQ+ a la mayoría heterosexual, las políticas progresistas a las conservadoras... Y así se difunde a través de las redes sociales y de las plataformas como Netflix

  9. es hermoso asistir al derrumbe de una época podrida hasta el tuétano. dixo...
  10. En todas las series se incluye de las formas más forzadas la consabida menestra étnica, el consabido sopicaldo penevulvar, el consabido engrudo políticamente correcto. Pero, mientras estas bazofias son administradas con cierto disimulo por otras compañías, como quien vomita morigeradamente en una bolsita y luego se limpia con pudor las comisuras de los labios con la puntita del pañuelo, en las series de Niggerflix el vómito es siempre a chorro libre, con sus arcadas tremebundas, sus tropezones sin masticar y sus salpicaduras asperjadas por doquier. En las series de Niggerflix hay hombres embarazados, indios comanches que se percuten el recto, porcos bravos maricones, príncipes escandinavos negros, monjas de clausura transgénero, cualquier mamarrachada woke tiene salvoconducto para acampar en los cerros de Úbeda. Si las series de las demás compañías suelen estar concebidas por tipos protervos y sibilinos, las series de Niggerflix parecen concebidas por los villanos de Los juegos del hambre en plena resaca de anisete, y dirigidas a un público íntegramente formado por homínidos dispuestos a recuperar hábitos plantígrados, y hasta a reproducirse por esporas, con tal de combatir el cambio climático o batir el récord de resiliencia inclusiva.

  11. Toño Komekoños dixo...
  12. Y, en los almácigos, ¿quién, en los almácigos, profundiza más que en su corazón?

  13. The Pánico dixo...
  14. Un flâneur es mucho más que una persona que se dedica al arte de pasear, es toda una filosofía y actitud ante la vida. Imagina a un persona, antiguamente escenificado por la figura de un hombre -aunque también se puede y se debe trasladar a las mujeres- que camina sin rumbo fijo por la ciudad como un espectador sin llamar la atención, sin interactuar con nadie. Es tal su (no) implicación en todo lo ocurre en sus calles que al final pasa a formar parte de la misma, como si fueran solo uno, pasando totalmente desapercibido ante los ojos del resto de viandantes.
    Su alma no es de un turista al uso, sino de un explorador nato. Es justo entonces cuando la ciudad se convierte en la protagonista absoluta del relato. Aquí no importan los lugares más emblemáticos sino el perderse para volverse a encontrar y disfrutar del enclave desde un punto de vista hedonista.

  15. Me encanta el obsequio de tus envios dixo...
  16. Decidí marcharme porque el triángulo pesaba demasiado

  17. El agua que no has de beber moja la mano que te escribe dixo...
  18. ¿Alguna reglamentación sobre la indumentaria para el Stroll Northwood?

  19. Vater de Barthes dixo...
  20. La sociedad está organizada de forma semiótica, por lo que
    que todo puede ser analizado como tal

  21. Illustration de l’hypothèse des plaques tournantes en psycogéographie. dixo...
  22. Estamos ahora ante una ciudad vacía, inexistente, carente de todo significado para el porco bravo y por lo tanto, casi desvinculada de una psicogeografía pura, dejándola a la deriva

  23. Los vasos Comunicantes dixo...
  24. Hay que estar atento a las señales que fabrican su propia sombra.

  25. él prefería la tranquilidad y la lejanía del tráfago mundano dixo...
  26. El paseante moderno observa, describe y participa de lo maravilloso-cotidiano que la calle le ofrece a su práctica más recurrente: una combinación de observación dispersa,
    contemplación ensoñadora y andar errante.

  27. Le Flâneur au salon ou M.Bon-Homme dixo...
  28. El flâneur deviene en sujeto recolector de las esquirlas que
    una realidad rota en mil pedazos, fruto del advenimiento de una nueva subjetividad moderna, nos hubo impuesto.

  29. Andar por los puertos es una de la formas de pereza que enriquece más dixo...
  30. @ 9
    De petimetre

  31. El flâneur no es sólo alguien que no está en casa y está en el umbral de la ciudad dixo...
  32. La ciudad no se constituye sólo por el espacio de la función, de la previsión y de la casualidad, sino también por aquel de la casualidad, del azar y de la indeterminación. En el paseo se rebela la posibilidad de explorar la ciudad en numerosas direcciones, encontrando cada vez nuevos significados, épocas, símbolos, proyectos colectivos y personales. El paseo es instrumento y metáfora moderna de reconstrucción y de uso subjetivo y ‘abierto como tu culo’ de la ciudad en
    contraposición a la visión de conjunto orgánica de la ciudad medieval y a la racional y cartesiana de la ciudad moderna industrial.

  33. (Los extraordinarios encuentros de la calle dixo...
  34. El fundamento psicológico sobre el que se alza el tipo de individualidades urbanitas es el acrecentamiento de la vida nerviosa, que tiene su origen en el rápido e interrumpido intercambio de impresiones internas y externas. El hombre
    es un ser de diferencias, esto es, su consciencia es estimulada por la diferencia entre la impresión del momento y la impresión precedente. En tanto que la gran urbe crea precisamente estas condiciones psicológicas, produce ya los fundamentos sensoriales de la vida anímica.

  35. El tornillo de Krauss dixo...
  36. ¡Cuánto cabe en un ojete¡

  37. zarabunda infernal dixo...
  38. Parece mentira pero la ciudad desaparece para convertirse en un emporio infernal. Las tiendas, los letreros luminosos, las casas, todas esas apariencias bonitas y regaladoras de los sentidos, se desvanecen para dejar flotando en el aire agriado
    las nervaduras del dolor universal. He llegado a la conclusión de que aquel que no encuentra todo el universo encerrado en las calles de la ciudad, no encontrará una calle original en ninguna de las ciudades del mundo.

  39. El Filibustero de los Ojos Grises del Destino -uno de los pioneros-. dixo...
  40. Un título de entrada como los de antes.
    Ya sólo por eso merece la pena.

    ¡Impetuoso..., homérico!

  41. Almirante Nelson dixo...
  42. Leí "Trafalgar por la ciudad" y me subió la tensión

  43. Michael Harriot dixo...
  44. La expresión “Staying woke” [algo así como mantenerse consciente o despierto, el equivalente a woke en español sería el adjetivo 'concienciado', según la RAE] integra una máxima tan común en el EEUU negro que el New York Times una vez simplemente la llamó parte del “dialecto negro”. El primer uso documentado de la frase stay woke se produjo en 1938, cuando el músico Huddie “Leadbelly” Ledbetter terminó una canción sobre nueve hombres negros aconsejando a los negros que viajaban por Alabama: “Stay woke... Mantened vuestros ojos bien abiertos”. En 1940, un miembro del sindicato Negro United Mine Workers prometió que los miembros en huelga “permanecerían conscientes más tiempo” que sus opositores.

    Cuando Martin Luther King se presentó ante la clase de graduados del Morehouse College para pronunciar el primer borrador de un discurso que le serviría de guía el resto de su vida, sabía que se estaba convirtiendo en un paria. El 2 de junio de 1959, el Gobierno estadounidense ya había puesto en marcha un programa destinado a “mantener el orden social existente” mediante la “neutralización de individuos percibidos como amenazas”.

    Mucho antes de que King advirtiera a los estudiantes contra la complacencia y la reacción racista, el FBI había creado lo que un informe de inteligencia del Senado denominó “etiquetas sin significado”, mediante las cuales acabarían por convencer a los estadounidenses blancos de que King era un marxista antiestadounidense empeñado en destruir su amado país.

    Ese día, King estrenó su discurso Remaining Awake, y explicó: “No habría nada más trágico durante este periodo de cambio social que permitir que nuestras actitudes mentales y morales se durmieran mientras se produce este tremendo cambio social”.

    Pero menos de una década después, muchos estadounidenses blancos pasaban por alto el tema central del mensaje más coherente de King: stay woke. En 1964, la mayoría de los neoyorquinos blancos consideraban que el movimiento por los derechos civiles había “ido demasiado lejos”. En 1965, una encuesta de Gallup reveló que el 85% de los estadounidenses creía que los comunistas estaban implicados en el movimiento por los derechos civiles. En 1966, solo el 36% de los estadounidenses blancos creía que King “ayudaba a la causa negra”.

    Vaya, qué poco han cambiado los tiempos.

    La guerra contra lo woke es algo inevitable, aunque ignorada o desconocida por aquellos que aceptan la historia blanqueada que los guerreros antiwoke buscan preservar. Mientras que algunos ven esto como parte de la reacción al reconocimiento del racismo de 2020, el esfuerzo cíclico para obstaculizar el progreso es tan predecible como un péndulo.

    Cuando más del 90% de los hombres negros del sur se registraron para votar una vez finalizada la Guerra Civil, el resentimiento racial resultó en la privación del derecho de voto, las leyes Jim Crow y los códigos negros que alimentaron la explosión de la industria del trabajo penitenciario. Tras la Primera Guerra Mundial, más de 380.000 veteranos negros regresaron al sur y empezaron a reclamar sus derechos, lo que derivó en una epidemia de linchamientos en todo el país. La integración en las Fuerzas Armadas estadounidenses dio pie al movimiento Dixiecrat. La legislación sobre derechos civiles suscitó una migración masiva de conservadores sureños del Partido Demócrata al Partido Republicano.

    EEUU siempre ha utilizado la desinformación como leña para una hoguera que atrae polillas “patrióticas” a su llama antidemocrática. En última instancia, el auge del movimiento antiwoke es la iteración más reciente del esfuerzo por mantener el orden social y político existente. No es más que otra “etiqueta sin significado”: una fachada para el racismo, la homofobia, la transfobia y todo tipo de desigualdades. En su núcleo yace el deseo de construir una unión menos perfecta, instaurar la injusticia y desmantelar la tranquilidad interna. Es antipatriótico. Ser antiwoke es ser antiestadounidense.

  45. El Fary dixo...
  46. Me honra que se me cite en una entrada de la anglogaliciancup, pedazo de toritos bravos!

  47. Anónimo dixo...
  48. Resumiendo, lo woke es lo opuesto a la ultraderecha racista -por lo tanto burra y tarada como ella sola-, homófoba y antifeminista. Es bastante sencillo, por lo tanto, ser woke sin saber siquiera qué significa la palabra.

  49. El Diagrama de Wokggers explicado a los wokggers dixo...
  50. “Mi Pequeño Libro de Activismo Interseccional” es el manual definitivo para niños de entre seis meses y seis años (“si eres adulto, te pido cordialmente que te vayas a la mierda y leas otra cosa”) con el que iniciarse en el activismo. En el interseccional, claro. Además de dar a nuestros párvulos las claves básicas para desenvolverse en sus primeros pasos como activistas concienciados y responsables (“si seguís mi ejemplo, también podréis ser valientes defensoras de la justicia”) despliega también ante ellos una serie de retratos de indispensables referentes, sus favoritos, de entre los más grandes pioneros en la historia de la justicia social.

    A modo de breves biografías, McGrath ilustra a los pequeños con las vidas y milagros de probos activistas como Greta Thumberg (“la influencia de Greta se extendió al ámbito político. Gobernantes de todo el mundo suplicaban que se les permitiera asistir a sus discursos para aprender de su sabiduría intuitiva”), Abu bkr Al-Baghdadi (“como integrante de la Religión de la Paz y uno de los austeros intelectuales religiosos más destacados del mundo, Abu creía en actos de genocidio pacífico y en ejecuciones austeras”), Meghan Markle (“no hay mejor forma de promover la igualdad y demostrar lo nociva que es la cultura consumista que ponerse a la cabeza de una de las más importantes revistas de moda del mundo”) o Tomás de Torquemada (“torturaba y quemaba a la gente por amor”).
    Pese a que, malas noticias, la ideología basada en las políticas de identidad y la corrección se encuentran ya establecidas en campos como la academia o la política, y que asistimos estupefactos a un repunte de acciones como la vandalización de estatuas, la cancelación de obras cinematográficas y literarias o despidos de profesores, en nombre de las más justas de las causas, Doyle no da por perdida la batalla cultural. “Yo no diría que está perdida” explica, “el problema es que la mayoría de las personas no comprenden por qué está sucediendo todo esto, por lo que se sienten impotentes para hacer algo al respecto”. Pone un ejemplo: “Si un empleado se ve obligado a asistir a una capacitación sobre “prejuicios inconscientes” o un taller en el que le dicen que es inherentemente racista debido únicamente al color de su piel, probablemente lo acepte, por temor a ver perjudicadas sus perspectivas laborales”. Ante todo esto, la fórmula para él es clara: “Tenemos que transmitir el mensaje de que se debe hacer frente a esta toma ideológica de nuestras instituciones”.

    La ideología Woke es “el peor método posible” para defender causas más que legítimas. “Crea una división innecesaria y exacerba los mismos problemas que pretende remediar”. Prosigue: “Reconocer que el racismo, el sexismo y la homofobia todavía existen y deben ser abordados, que es justo y necesario, es el punto clave. Pero el mejor enfoque para encontrar una solución a estos problemas no es el woke, es el liberal. El movimiento woke es esencialmente antiliberal”.

  51. Titania McGrath: No binaria, polirracial y ecosexual, la infatigable y vegana activista dixo...
  52. El fascismo bien entendido nos ha dado las pelis de acción más divertidas. Y lo de ser apolítico en el mundo del ocio jamás ha sido norma ni meta.

  53. boomer shooter dixo...
  54. Mainkind is dead. Blood is fuel. Hell is full

  55. Stroll Northwood dixo...
  56. Perderse a sí mismo. Si uno se ha encontrado a sí mismo, debe saber perderse de vez en cuando y luego volverse a encontrar

  57. Punxsutawney Phil dixo...
  58. El evento de Punxsutawney, en el que cada año vemos a señores con chistera abrazar a una marmota, se celebra desde 1887 y es el más famoso, pero también tiene lugar en otras localidades de Estados Unidos y Canadá. En realidad, como sucede con otras tradiciones americanas, ni es tan tradición ni es americana.

    Antiguamente, los franceses y alemanes de la zona alpina, cuando no estaban a hostias entre si y encontraban un oso fuera de su guarida hacia la parte final del invierno, una vez que finalizaba su letargo, observaban si hacía o no sombra para tratar de anticipar el tiempo.

    Otras fuentes poco potables incluyen a erizos y tejones entre los animales que supuestamente salían de la madriguera y volvían a meterse si se asustaban de su propia sombra. En cualquier caso, parece que los inmigrantes europeos introdujeron en el Nuevo Mundo esta tradición, alimentada año tras año por el anhelo de poner fin al invierno e irse a las playas a mamarse.

  59. Newcastle finally have an opportunity to win their first trophy since the Fairs Cup in 1969. dixo...
  60. First Wembley final since 1999. First League Cup final since 1976. A chance to win their first trophy since Ujpest Dozsa were beaten in the 1969 Inter Cities' Fairs Cup Final.

    In that era, Newcastle's fans were often criticised for expecting too much from a club that has not won a trophy for almost 54 years - this was harsh judgement.

  61. Ascomurray dixo...
  62. En este blog, el día de la marmota dura 365 días

  63. Cuando no había ningún jugador negro en España, cuando no había ningún jugador musulmán en España, la perla del Atlético de Madrid era negra y musulmana. dixo...
  64. Quien no pierda el valor y la confianza, jamás perecerá en la calamidad

  65. esa sonrisa luminosa en la cara, llena de adioses y de esperanzas dixo...
  66. El flâneur, al desdramatizar la memoria quitándole su
    dimensión diacrónica la convierte en mera nostalgia

  67. De Stroll Northwood en la farmacopornomegalópolis dixo...
  68. Stroll N deviene así una resignificación del flâneur moderno en el contexto de la instauración de una identidad gay que, según Joe Wokgger, al intentar ampliar el ámbito de la normalidad arrojaba a los bordes de lo humano a nuevos excluidos como la travesti, la loca, la perraputa cajera o el chongo brokenass.

  69. no somos de distinto sexo, somos de distinto material dixo...
  70. -¿Cómo podemos saber si realmente estamos enamorados?

    -Vamos al parque a mirar la luna. Si al verla, decimos: “Ahí está la luna”, mientras metes la mano en mi bragueta y yo te acaricio el culo, quiere decir que realmente estamos enamorados. Pero si contemplamos la luna y nos sentimos sublimes, quiere decir que, además de estar realmente enamorados, somos dos mierdas heteronormativas.

  71. Doctor Pyg dixo...
  72. Cae tu meada. Oro desde tu entrepierna hasta mis piernas. Rayo de sol humeante y vertical. Cae tu meada. Chispas doradas de tu amor líquido caen sobre los engranajes caliente de mi locura. Báñame. Empápame. Cae tu meada. Méame la espalda, méame el culo, los huevos, los pies y lléname la boca. Luego yo, cerdo marítimo, por las grietas de tu pecho de piedra te mearé el corazón y bañaré los últimos bostezos de tu pureza.

  73. flâneur, la figura literaria emblemática de la ciudad moderna dixo...
  74. Su deseo se recorta en el mapa de la ciudad y recorta/mapea, a su vez, la ciudad a partir de su mirada. Desde esta perspectiva, no se trata de atravesar las divisiones invisibles pero legítimas, hegemónicas, de la ciudad, sino, por el contrario, de realizar un mapeo contrahegemónico, dibujar una nueva ciudad, desconfigurar y reconfigurar los espacios, trazar líneas transversales sobre el mapeo hegemónico y normalizador para generar una nueva cartografía.

  75. Elucubraciones de un flâneur. dixo...
  76. En el Mal absoluto nuestra subjetividad reconoce su desdicha

  77. España es la nación más antigua de España dixo...
  78. El hecho de participar en una cultura común forja vínculos entre consumidores con una mentalidad parecida, y dichas afinidades asientan los cimientos de una identidad cultural compartida

  79. Transbegoño dixo...
  80. Una ciudad generosa gobernada por psicópatas que no perpetran desastres mayores porque una sociedad civil movilizada instituye mecanismos de paliamiento

  81. Otro día de la marmota dixo...
  82. Imagínate cancelar tu residencia fiscal del país cuyas monedas llevaban tu cara

  83. Polvos de hodiernos lodos dixo...
  84. Está bien pedir ayuda. Pero la fortaleza la trabaja uno mismo.

  85. hombre gris que coge los tranvías dixo...
  86. Consciente de la envidia mutua que se tenían dos de sus capitanes, Le Main les convocó y propuso concederles lo que pidieran, con la particularidad de que daría al uno el doble de lo que el otro pidiese para si mismo. Al final, uno de ellos pidió que le sacaran un ojo para que el otro quedara ciego. Obviamente, el comportamiento de ambos fue castigado con el destierro al comprobar que no había solución a su envidia.

  87. Porcobravo Flâneur dixo...
  88. Es necesario que el 'flâneur' esté totalmente desocupado: que pasee sin prisas, sin rumbo fijo, sin destino u objetivo y que mire muy de cerca lo que le rodea. Yo asociaría la 'flânerie', más que con la ligereza, con la disponibilidad de la atención y con dinero en los bolsillos.

  89. Insomne dixo...
  90. El Stroll Northwood es como tirarse un pedo en un calcetín usado.

  91. La diferencia estriba dixo...
  92. El Weer Balker es muy diferente del 'flâneur': prefiere la naturaleza a la ciudad, alcanza momentos transcendentes de éxtasis o revelación, está ensimismado. Es un deportista.
    En cambio, el 'flâneur' es más pijo y desocupado: está volcado en lo que lo rodea, en el exterior, por medio de la mirada. Es impersonal: se anula en favor de la complejidad confusa de lo real, encarnada en la ciudad y sus olores de cloaca.

  93. Inés Castro Barreto dixo...
  94. Esa violenta voluntad racista de profilaxis social se expresa desde una intelectualidad neodarwinista que encuentra la superioridad de la especie en una agresiva homosexualidad
    hedonista y misógina; al anular la reproducción sin inhibir el hedonismo, se intenta la concreción de un ideal: el exterminio de la raza humana en un cosmos de autosuficiencia masculina aunque antipatriarcal en el que, obviamente, la mujer se torna prescindible, superflua en medio de la aniquilación apocalíptica.

  95. Troll dixo...
  96. Debería llamarse el Troll de Sherwood.
    Màs entrenar y menos gilipolleces.

  97. Diario de un Porco Bravo dixo...
  98. Viernes, 3 de Febrero de 2023



    Parece que fue ayer cuando retozaba entre turrones, chocolates, dulces variados, vinos y bebidas de elevada graduación. Que me pasaba el día comiendo y bebiendo, y....



    Si, vale, efectivamente fue ayer. Y antes de ayer, y la semana pasada, y la otra...



    Pero a lo que quería referirme, es que, aunque no lo parezca, ya transitamos por el segundo mes de este año 2023. En principio año importante, año de regreso de la AGC.

    Por qué el MAIN, sigue manteniendo su discurso, sigue dando su palabra de que este año volveremos a disputar la copa.



    Y yo sigo creyéndole, sin dudar...bueno sin dudar demasiado.

    Sucede que a veces miro a mi alrededor y veo un desierto procobavista alarmante:



    · La mitad está desaparecido

    · La otra mitad gordos cómo repolos, bebiendo y comiendo al mismo ritmo que yo

    · No ves a uno entrenando ni poniéndose en forma

    · No hay dietas, ni reuniones, ni xuntanzas, ni purgas...

    · Ni asomo de pachangas ni partidillos varios

    · La sede patas para arriba, el otro día me acerqué a visitar las copas y departir con algún porco que por allí abrevase, y me encuentro que hay dos camareras, DOS!!!



    Pero yo sigo creyendo...casi todos los días.

    Se que en breve recibiré un mensaje, una llamada... y se reactivará el chorromoco

    Será momento de ponerme a buscar por el armario mi camiseta negra porca y brava, de ponerme a entrenar duramente y de decirle a banano que se prepare, que salimos de nuevo al mercado

  99. Mike Barja dixo...
  100. Since most people spend most of their time in the Stroll Northwood, losing your shit means, well, losing your shit.

  101. The Orb of Osuvox! dixo...
  102. Y ahora cualquier cosa que tenga que ver con ciudades y caminar se llama ”psicogeografía“. Es un poco molesto, pero se me ha pegado. Qué le vamos a hacer

  103. Ghost Grey dixo...
  104. Los aeropuertos y los hospitales son el mismo tipo de construcción: un espacio de tránsito lleno de gente desesperada que sabe a dónde ir pero no sabe cómo.
    Son un marco de terror, paranoia y agotamiento. Es exactamente demasiado cálido, hay plantas y árboles a tu alrededor pero nada de luz natural, no sabes si es de día o de noche...Y la gran ciudad es ese tipo de lugar de partida genérico. Y en la sombra de este modelo, la gente se va a vivir a los parques, a las estaciones abandonadas. Cada cajero automático tiene alojado a una persona sin hogar con sus perros; la ciudad moderna se ha convertido en la ciudad victoriana, la parte empobrecido de la ciudad es cada vez más gótico. Más invisible. Esa es la ciudad de las desapariciones, una ciudad donde ya no vemos a cierta gente.

  105. Mike Martelo dixo...
  106. Me ha dicho el doctor que tengo mal formada una glándula del deber social y una deficiencia congénita en la fibra moral y que, por lo tanto, estoy excusado de salvar universos y de perpetrar Stroll Northwoods

  107. Escocia va a morir en su línea de 22 dixo...
  108. Hoy comienza una nueva edición del vendaval ovalado del Hemisferio Norte.

    Y ya van 129, sumando todos los formatos.

    Fiel a la cita, nuestro Enorme Aparato Mediático, indisimulado simpatizante de las tres naciones del Borde Celta, se hace eco de tan magna competición.

    Francia, vigente campeona.
    Gales, ganó en 2021.
    Inglaterra, último título en 2020
    Irlanda no gana el torneo desde 2018.
    Escocia desde 1999 (aún se llamaba el V Naciones)
    Italia. ¡Ay, la Italia!

    Boroman patea a palos en el mal llamado VI Naciones.

  109. Suena Barry Milk dixo...
  110. you're getting sacked in the morning

  111. Mike Cebolas dixo...
  112. Dejaron atrás la veintena de casas y se alejaron del acantilado por la estrecha carretera, rumbo al norte.

  113. Anónimo dixo...
  114. Un pasatiempo para pijos ociosos y afeminados

  115. The Shaggy Sodden King of that Kingdom dixo...
  116. Of everlasting, they are strolling together. Listening to the larks. Ringing in their orbits.

  117. woke garbage dixo...
  118. El resultado de ese cataclismo fue la fuerza nefasta llamada Anglogalician, pero no la desterramos y en lugar de eso, estudiamos el arcano vil para nuestro propio poder y riqueza

  119. Orson (Falstaff at Midnight) dixo...
  120. There's nothing quite like taking a heartfelt stroll down memory lane until a cul-de sac y que le den por culo al Stroll Northwood

  121. Malaquías Malagrowther dixo...
  122. And they descended upon the earth to strengthen their ranks.

  123. Pericles porcobravo dixo...
  124. Los elogios que se pronun­cian acerca de otros sólo resultan tolerables en la medida en que cada uno cree que él mismo es capaz de realizar las mismas acciones que oye elogiar; pero ante lo que va más allá, los hombres enseguida sienten envidia y no lo creen. Tal es el destino del Stroll Northwood, oscilar entre el descreimiento y la envidia ajenas y la certeza de que solo los bartenders locales son conocedores de la verdad parcial de la pinta consumida y el petisco devorado.

  125. Persiguiendo una marea de metáforas masturbatorias dixo...
  126. La neurastenia del solitario se instaló cuan larga era en los recovecos más intestinos de su magín.

    Y así su imaginación se encapotó.



    Mujeres inalcanzables, encas(t)illadas, lo observaban desde una distancia imposible

    (impasible -de esas distancias por las que corre el aire a sus anchas-).



    Observaban su karma innato de cobaya sólo apto para perturbadas

    (se juega con el juguete, dale que dale, hasta que se rompe).



    Observaban sus gimnasias tantálicas, sisifoideas, su deambular estéril

    (de cobaya sonado por aquel cul de sac con ínfulas de laberinto).



    Observaban y acababan, bostezantes, por dejarlo

    (porque tanto observar lo cobayescamente previsible resulta cansino).

  127. el semental de turno realizando su parodia hidráulica dixo...
  128. Abismo es el nombre que damos a lo que no podemos salvar. No hay abismo, ni fin del camino; sólo existe el alma del hombre, que nombra todo de acuerdo con su propia valentía o cobardía.

  129. Paracaidista dixo...
  130. Todos los caminos llevan a la Anglogalician; el Stroll Northwood conduce al Main ¡Salta al vacío ya!

  131. Barrabás Balarrasa dixo...
  132. A los antepasados de mi sangre y a los antepasados de mis sueños he exaltado y cantado

  133. Nuggetsdepollo dixo...
  134. I'm very sceptical when people start pointing fingers.

  135. Elmer Gruñón Egghead Fuck dixo...
  136. ANGLOGALICIAN CUP

    Esta es la historia de un universitario demagogo que durante las vacaciones de verano, se enrolaba en un barco de pesca para redimirse de sus excesos intelectualoides. Compartía faena con un puñado de marineros casi analfabetos, pero que le enseñan las constelaciones por las que orientarse, y entre ellas, una estrella principal que les servía de guía. Una noche, él les cuenta que es muy posible que esa estrella, aunque la luz siga llegando a la Tierra, se haya apagado hace mucho, y ellos, incrédulos primero, y desesperados después, se desmoralizan, entristecidos. Si lo que siempre estuvo allí ya no está, se cuestionan ¿cómo podremos seguir orientándonos? Y el trabajo cotidiano empieza a salir mal, y la convivencia se deteriora, y todo se va a la mierda hasta que una noche, el estudiante, señalando una región oscura del firmamento, les dice: «¿Veis? Puede que allí, aunque ahora no la veamos, esté naciendo una estrella nueva cuya luz podremos llegar a ver en el futuro. Estad atentos y no dejéis de buscarla».

  137. Al Oeste Del Ocaso dixo...
  138. Note that the cow is able to jump over the Moon with ease because the Main in the Moon has temporarily brought it down to Earth.

  139. Orson (Falstaff at Midnight) dixo...
  140. Main corta la baraja y reparte las cartas, pero es el porco bravo el que las juega.­

  141. ¿Se puede hablar de un flâneur contemporáneo? dixo...
  142. El estudio del flâneur como personaje urbano lleva a entender la relación del peatón con la ciudad, en especial con los espacios comerciales. Al mismo tiempo, nos permite examinar el cambio en la sociedad de consumo y sus afectaciones en la vida cotidiana y en la manera de relacionarnos con la urbe. Al comprender los nuevos modos de consumo urbano, podemos delinear el futuro de la sociedad y adelantarnos a las consecuencias de la cultura de masas como forma de vida en la ciudad del siglo XXI.

    De este paralelo entre los pasajes comerciales contemporáneos y los grandes centros comerciales podemos concluir que la figura del flâneur se adapta al primero, pero se banaliza en el segundo. Las dinámicas comerciales y las experiencias urbanas que las acompañan han ido cambiando en los años y se crean nuevos personajes protagónicos dentro de las relaciones urbanas.

    Vemos también que los pasajes comerciales pasaron de ser el refugio de los más afortunados a ser lugares donde convergen todas las clases sociales y la considerada como privilegiada es una minoría que tomaría el puesto del flâneur.

    Existe una esperanza fuera del centro comercial: todavía hay lugares no invadidos por completo por el consumo y la producción en masa; todavía persiste la magia de encontrar ese objeto con alma al que se llega después de haber deambulado por una calle comercial que parece igual a las demás, pero que secretamente es el despertar del escenario de la flânerie contemporánea.

  143. No es extraño que escoja a la prostituta, al coleccionista y al flâneur dixo...
  144. El flâneur no parece tener conciencia de lo que hace, de lo que es. Se entrega, como agente, como un médium, como un títere, a que el espíritu de la ciudad lo arrastre por sus calles y lo escupa a sus antros más límitrofes

  145. ¿éstas seguro de que tal leyenda sea la verdadera? dixo...
  146. Las ventanas son los ojos de la ciudad -y naturalmente deforman todo lo que miran. Ahora estás en un punto de gran pureza, y quizá ves las cosas como una paloma o un caballo que no saben que tienen ojos

  147. O Xoves Hai Cocido dixo...
  148. El Stroll Northwood es la gastronomía del ojo

  149. Nokia Huawei dixo...
  150. El móvil es la heroína del siglo XXI

  151. Stroll Wanker dixo...
  152. Stroll Northwood es propenso a vivir en la más plomiza de las profundidades o en la más turbulenta de las alturas

  153. Blog Sponja dixo...
  154. La pina piñonera guarda secretos que jamás revelará

  155. Weer Eastwood dixo...
  156. El S.N tiene tres reglas: entidad legítima, brío sincero y propósito espiritual

  157. tren de borrascas dixo...
  158. La ciencia y la historia son mera especulación a la manera de la filosofía. La calidad y la cantidad no guardan esa armonía precisa y necesaria.

    Vivimos en un mundo en el que ha desaparecido la sinceridad, a pesar de que existe un enorme derroche de erudición falsa, una erudición agresiva, crítica y peligrosa.

    La ciencia abre una puerta y la historia se la cierra, con el consentimiento de la filosofía.

  159. siempre queda algo de la mentira propagada. dixo...
  160. Se hace la revolución para ahondar y consolidar esa separación, no para suprimirla; se hace, si es una verdadera emancipación, en pos de la tangente ática, equilibrio entre el bien privado y el bien común. Esa separación debe, no solo existir, sino parecer que existe. El líder no debe pescar las langostas que sean comida de una cumbre de Estado, porque una cumbre de Estado no puede parecer una invitación informal a amigos a su casa. El rey debe tener dos cuerpos.

  161. Porco Granate dixo...
  162. Me empieza a chirriar mucho ese cliché engreído, tan nuestro, del «donde se merece», del «donde nos corresponde por historia»; esa melancolía del «con lo que fuimos», incapaz de disfrutar de un presente en el que no se sea lo que se fue. Creo que deberíamos asumir con serenidad que aquellos años dorados fueron pocos y excepcionales y que, ante todo, somos un histórico, no de Primera, sino de Segunda o de Segunda B. Tal vez lo que nos corresponda por historia sea estar aquí. Y, por ello, tal vez debamos dejar de considerar la historia como dadora y quitadora de razones. Se hacen revoluciones cuando se piensa: si la historia dice que no se puede hacer, peor para la historia.

  163. woke garbage dixo...
  164. Encerrar a todos los partidarios de que la literatura nos cura con los partidarios de que la buena literatura nos debe doler.
    Y que solo puedan salir los que maten a los otros, y nos libramos del 50% de esos pelmas de golpe a manos de los otros pelmas

  165. O Xoves Hai Cocido dixo...
  166. En tiempos de penuria, inacabables, viejos, a punto de renovarse por la acción de dirigentes incapaces y tiránicos y pueblos ovinos, no solo era escaso el cereal, sino también la leña como combustible. El horno comunal fue un invento maravilloso que permitió comer pan, generalmente candeal, al pueblo más humilde, porque el calor generado por troncos y ramullo se aprovechaba durante muchas horas para confeccionar las hogazas. Pero en el ámbito doméstico también se necesitaba calor para cocinar y calentarse. El lar, el llar, el fuego bajo, era centro de reunión de la familia; pero la noche recogía a sus desamparados hijos en el lecho y aún se podía estirar el fuego del hogar para hacer en vísperas de fiestas una suerte de pan subcinéreo maravilloso, anónimo como el invento de la rueda: el panchón.

    Amásese, sin levadura, harina de escanda, el trigo norteño que no se extiende por planos inmensos mesetarios, con agua y un poco de sal. Colóquense unas brasas del fuego restantes de la combustión diurna en la base del fuego bajo; cúbranse estas con algunas grandes hojas de col y deposítese sobre ellas un túmulo de la masa, una pequeña colina cereal, moldeándolo. Después, cúbrase el montículo, de tamaño proporcional a los comensales previstos, con más hojas de col y brasa menuda restante y, por fin, envuélvase todo con la ceniza que ha sido ladeada en el llar, haciendo un montículo que recuerda vagamente a la preparación del hamin sefardí. El montículo caliente hará su labor en las 12-14 horas siguientes. Pasado ese tiempo, tras despojar la capa calefactora ya extinta, se frotará la gran hogaza resultante, de la que se eliminará la capa superficial, excesivamente impregnada de aromas vegetales, humos y ceniza. El enorme migajón se desmenuzará con las manos, poniéndolo en un lebrillo amplio y añadiéndole manteca de puerco o mantequilla, según el abasto doméstico, y después azúcar, moviendo todo bien hasta hacer unas migas de color levemente tostado, dulces y untuosas, que se tomarán con cuchara y alguno de los más chicos de la casa con un poco de leche templada encima.

  167. Zaštitnik Bitingkerbs dixo...
  168. The Hydrogen Dog And the Cobalt Cat,
    Side by side in the Armory sat.
    Nobody thought about fusion or fission,
    Everyone spoke of their peace time mission.
    Till somebody came open the door.
    There they were, in a neutron fog.
    The Codrogen Cat And the Hybalt Dog;
    They mushroomed up with a terrible roar
    —And Nobody never was there—
    No more.

  169. J.J Vázquez dixo...
  170. El espacio del ano es fundamental en todo ejercicio de poder sodomita.

  171. Joker from Arkham dixo...
  172. El poeta maldito se zambulló en el empirismo del viaje, en el sentido literal y metafórico de la palabra, pues es sabido que su relación con los opiáceos y otros alucinógenos era la manera que encontraba de “alargar las horas”, de extender el tiempo y vivir “muchas vidas en un espacio de una hora”. Recorría mundo, calles y campos en estado de embriaguez, de alucinación, de creación y, en esas circunstancias, pudo escribir sobre ello y recibir un reconocimiento literario histórico que pocos le niegan. La autonomía para callejear, a cualquier hora y en cualquier estado, el paseo como estímulo y desenredante de la mente, ha sido alimento de escritores y pensadores ya desde la época griega, en la que los peripatéticos otorgaban la fluidez de las ideas al poder de sus pasos.

  173. Irene Belarra dixo...
  174. Sí, mi deseo incontenible de mezclarme y fornicar con camioneros, soldados, parroquianos, mi deseo de formar parte de una escena anónima, escuchando, apuntando en mi memoria, termina siendo arruinado por el hecho de ser chica, una fémina en peligro de ser asaltada y agredida.
    Sí, quiero hablar con todo el mundo, ser capaz de dormir en un campo abierto, viajar hacia el oeste, caminar libremente de noche

  175. Mi número favorito dixo...
  176. En 2023, para muchos hombres, todavía es así; antes putero que maricón.

  177. Malcriada dixo...
  178. En el movimiento voluntario más repetido por nuestro cuerpo encontramos la posibilidad de una poderosa revolución. Caminar, solamente caminar, es ya sinónimo de emancipación, de independencia, de poder. Por eso es fundamental cuidar lo cotidiano, suele albergar lo extraordinario; sería importante no perder este hecho de vista. Creo que en las etapas más enredadas, emocionalmente hablando, de mi vida, he usado la caminata como terapia. No el deporte, no correr, no la actividad; el acto de caminar, insisto, simple, ensayado, nato. Caminando me desenredo, me reconozco, me gusto. No porque me guste siempre lo que encuentro en mi cabeza, sino porque recupero las razones de las decisiones que he tomado para ser la mujer que soy hoy. Camino en un acto de revolución personal, de replanteo, de experimentar el poder que me dan mis pies. Y en el acto de caminar se hace tangible mi espera activa. Yo no sé esperar y punto, tengo que “esperar mientras”. Mi cuenta atrás necesita una cuenta hacia delante. Pasear aligera porque el acto en sí no tolera el exceso, lo superfluo, lo no necesario. El paso necesita de la liviandad que da ceñirse a lo fundamental. Caminar es uno de mis usos favoritos del tiempo. Me gusta ocupar el mundo por placer, no por la necesidad de hacer o llegar a ninguna parte. Ando sin consumir y sin sacar rédito económico de ello, sin prisa, sin otro propósito que observar la tierra que otros han transformado en calles. El derecho a existir en solitario en el espacio urbano no es un capricho de malcriadas, es la naturaleza abriéndose paso.

  179. Las flâneuses, como los flaneurs de Baudelaire dixo...
  180. Somos, entre otras cosas, que generalizar (repito) es de vagos, observadoras, críticas, ensayistas, voz pública del espacio; mujeres libres. Y sí, algunas bebemos. Lo hacemos en los bares que están abiertos. Bebemos legalmente en bares abiertos legalmente. Somos usuarias e interventoras del espacio urbano; protagonistas, activas o pasivas, visibles o invisibles, solitarias o acompañadas, sobrias o borrachas, a voluntad según el día, la hora y las circunstancias de la vida. La que cada una quiera y elija, pero sin tener que “salir a pelear” con nadie, por favor, que bastante tenemos ya cada una con lo nuestro.
    El Stroll Northwood es tan femenino, que es nuestra nueva bandera.

  181. Albion KillFoes dixo...
  182. A Faggot of French Sticks. There is also a discussion of The Stroll, as the flaneur is an inseparable feature of the homosexual streetscape, and the Dog Ass Market.

  183. Thor Pede Quinsling dixo...
  184. 202 entradas.
    13.447.869 millones de visitas en estos momentos.
    69.203 comentarios mientras escribo estas líneas.
    23 autores.
    513 colonos en Galizalbión.
    Hoy cumple 15 años de lucha y polémica el llamado Mainblog, auténtico mascarón de proa de nuestro Enorme Aparato Mediático.
    ¡15 AÑOS!

    Gracias, muchas gracias de hígado y corazón, a todos los que han hecho posible que seamos quinceañeros una vez más.
    Seguiremos peleando en el barro para decepcionaros mes tras mes, año tras año.
    Gracias.

  185. Andar por los puertos es una de la formas de pereza que enriquece más dixo...
  186. Donde quiera que giremos, el tiempo sigue su marcha.

  187. tren de borrascas dixo...
  188. Pasan vagos transeúntes, diversos los acentos, variados los enigmas.

  189. ¡Gloria y Honor a la División! dixo...
  190. El 10 de febrero de 1943, alrededor de 5.000 voluntarios de la División Azul hicieron frente en Krasny Bor al potente ejército soviético integrado por más de 45.000 hombres y apoyado por el fuego de la artillería y los blindados. Krasny Bor fue el combate más duro que tuvieron que librar los voluntarios españoles en el Frente Oriental y por el que pagaron un alto coste en bajas.

  191. los «andrajosos» e impávidos de Krasni Bor dixo...
  192. Un compromiso con el cumplimiento del deber que jamás será olvidado

  193. Anónimo dixo...
  194. Os expañois sempre facendo o ridículo, en especial cando van de azuis pola vida

  195. Inés Castro Barreto dixo...

  196. Si esta cartografía gay emerge como consecuencia de la extrusión bajo la opacidad que genera la cartografía dominante, la cartografía de las prácticas lesbianas aparecería como un negativo de la cartografía gay. Es decir, como sugiere Willy Woke, haciendo referencia a la paradójica situación de la figura de la lesbiana en relación con las tecnologías visuales: la lesbiana se encuentra en el punto muerto del espejo retrovisor.

  197. Mientras que la figura del gay aparece como un “flâneur perverso” dixo...
  198. Al Stroll Northwood hay que afrontarlo en términos no ya de distopía o agorafobia sino más bien de lo que podríamos denominar topofobia, del rechazo de toda especialización y del horror a toda cartografía.

  199. os voy a dar diez hostias al cuadrado a cada uno, o sea cien hostias. dixo...
  200. Las nociones cartográficas de panóptico y de heterotopías del S.N me la sudan.
    Esto es una coartada más para salir a mamarse en bares donde no te conozcan.

  201. 101st Airborne Division dixo...
  202. ¿Fue lo de Yardley Gobion el Krasni Bor del porcobravismo tumescente?

  203. Handicap Salazar dixo...
  204. Es domingo de Supertazón.
    Edición LVII, la 57 para los que no sabéis latín.

    La disputan Kansas City Chiefs y Philadelphia Eagles.
    Los primeros, a pesar de lo que puedan pensar por el nombre, son del estado confederado de Misuri.
    Los segundos, de la Mancomunidad de Pensilvania.
    Los Chiefs han ganado dos veces la Super Bowl.
    Los Eagles, 1.

    20 equipos saben lo que es ganar esta competición.
    Los Angeles Rams, vigentes campeones. Y tienen 2.
    Tampa Bay Buccaneers, en 2021. (2)
    Kansas City Chiefs, 2020. (2)
    Nuestros New England Patriots. 2019. Y van 6.
    Philadelphia Eagles, 2018.
    Denver Broncos, 2016. (3)
    Seattle Seahawks, 2014.
    Baltimore Ravens, 2013 (2)
    New York Giants, 2012. (4)
    Green Bay Packers, 2011 (4)
    New Orleans Saints, 2010
    Pittsburgh Steelers, 2009 (6)
    Indianapolis Colts, 2007 (2)
    Dallas Cowboys, 1996 (5)
    San Francisco 49ers, 1995 (5)
    Washington Redskins, 1992 (3). Ahora tiene otro nombre.
    Chicago Bears, 1986.
    Las Vegas Raiders, 1984 (3)
    Miami Dolphins, 1974 (2)
    New York Jets en 1969.

  205. You dixo...
  206. El Stroll N es un pasatiempo tonto del hombre blanco privilegiado

  207. El flâneur puto dixo...
  208. En los descentramientos que habilita, la deriva desterritorializa, pero también traza e inventa territorios. Así, el deambular del flâneur marica moviliza la creación disidente de contraespacios, territorios que se inventan en el mismo momento en que son habitados, espacios queer que desorganizan y traicionan la productividad disciplinaria de los espacios construidos y sus marcaciones identitarias estables

  209. dandy lumpen dixo...
  210. Nada aterra más al ser humano que ser tocado por lo desconocido

  211. Stertebeker Mantenfel dixo...
  212. Manera sencillísima de destruir una ciudad: se espera, escondido en el pasto, a que una nube de la especie cúmulo se sitúe sobre la ciudad aborrecida. Se dispara entonces la flecha petrificadora, la nube se convierte en mármol, y el resto no merece comentario.

  213. Y yo con estas pintas dixo...
  214. Hasta el Renacimiento, la ciudad era un espacio lo suficientemente seguro como para que sus peligros internos fueran preferibles a los que se hallaban extramuros. Aventurarse más allá de los límites de la ciudad significaba ponerse a merced de una cosa sin nombre. Solo estaban dispuestos a tomar ese riesgo aquellos que ya no encontraban adentro lo que más anhelaban, o los que habían sido cegados por su resplandor feral: mientras que, como un animal delirante, Sócrates fue conducido más allá de las murallas de Atenas por el fármaco del texto, a donde los árboles y los campos nunca habían querido enseñarle nada, el exilio de la ciudad donde habitaba su amor fue para Romeo la peor de las torturas, y por eso prefería la pena capital antes que salir de Verona —antes que salir de Julieta. En ambos casos, fuera de la ciudad se vislumbraba una certidumbre bicéfala: la de la intemperie y la posibilidad de una agresión salvaje, pero también la promesa de un inédito. Afuera estaba lo que no tenía cabida en la vida cotidiana: otra vida que se dilataba más allá de su potencia terrenal. En todo caso, nada aterra más al ser humano que no reconocer aquello que habrá de devorarlo.

    Antes de la disolución de los muros —concretos o sutiles— que separaban la ciudad del campo, cierta repugnancia fantasmagórica de la naturaleza había sido el principio estético de las grandes urbes. En la ciudad premoderna, “esa cosa” que nos mira sin que podamos verla, que nos asecha desde un no-lugar de paso, desde la disimetría del ver, era la apertura radical a un región sin ley que los muros se encargaban de mantener a raya. El límite urbano era el fin de esa zona del mundo que la espada humana aún no había arrebatado de la ley natural y sus crueldades, y por ello era a su vez una garantía firme de paz y seguridad. “El aire de la ciudad te hace libre después de un año y un día” porque adentro la muchedumbre le pone un rostro humano a la violencia.

    Por supuesto, en la modernidad este principio del horror urbano pronto se transformó en un pavor claustrofóbico y enrarecido de la autodeterminación personal. La primera y más notable de las manifestaciones de este horror fue la nostalgia de ese absoluto cronológico por el que, en el antiguo régimen, la vida se encargaba de ordenarse a sí misma. Con el fin del imperio del absoluto, el paso de las formas de organización premoderna a las de la burguesía capitalista estableció transformaciones sobre los procesos de reparcelación de las unidades de tiempo que organizan la vida cotidiana; la ley de la producción comenzó a regular la vida en las grandes urbes y reestructuró las unidades de tiempo para acrecentar el adeudo de la vida con el capital. Al igual que el espacio, el tiempo en la ciudad moderna comenzó a dividirse en varias unidades de uso, relacionadas con las escalas de una jornada laboral. Y a medida que la ciudad moderna implosionó, el sentido de la vida se tornó vulneración y resentimiento de la temporalidad personal.

  215. Y yo con estas pintas dixo...
  216. El control arquitectónico del tiempo de los cuerpos en las sociedades industriales es una constante de la ciudad hipermoderna. El cenit de los dispositivos modernos de control urbano lo alcanzaron, ya se sabe, los trabajos haussmiannos en la París del Segundo Imperio. La iniciativa de Napoleón III tenía como meta oficial el reacomodo y estandarización de la vida postrevolucionaria en la gran capital francesa, o como la describió W. Benjamin: “Razón estratégica para despejar las perspectivas de la ciudad”. Temporalización de las barricadas, del fantasma de la Revolución y del viejo Chateaubriand dando un paseo por sus antiguas aceras: la hausmannización de París no fue sino la edificación de un odio mordaz contra el poder orgánico de los cuerpos en rebeldía y un reacomodo de las viejas antipatías de clase. El urbanismo represivo del Barón Haussmann que ensanchaba las calles parisinas y ocultaba con adoquines la playa fue enmascarado por un discurso donde abundaban las metáforas positivas de corte médico: la ciudad era un cuerpo vivo; sus calles, arterias que debían ser liberadas para el libre tránsito; el aire entraba en sus pulmones infectados por las miasmas de la insalubridad social; sus médicos fueron los ingenieros del mejoramiento del sistema fisiológico parisino. Es decir: la ciudad, y no los cuerpos humanos, comenzó a ser, desde la nueva París, el ser vivo que debía ser salvado del sofocamiento que resultaba de un paseo con miriñaque por sus calles en decadencia. Para que la capital del siglo XIX fuera puesta en marcha su anatomía debía ser curada de la enfermedad del tiempo: del tiempo que no se movía desde el siglo cuarto y del tiempo que se consumía en el tránsito de los carruajes que circulaban por sus angostas avenidas medievales.

    Así imaginada, la ciudad hipermoderna es un personaje al estilo Godot: un antipersonaje, un fantasma, una sombra que impulsa la historia íntima de un tipo humano sin llegar a hacerse presente. Hamlet, Godot, la Dublín de Ulises y la Ciudad de México de La región más transparente tienen en común esa fuerza motora que protagoniza, en las hipóstasis de sus protagonistas vicarios, un deus ex machina somático. La ciudad hipermoderna, fantasma como estos personajes, es una fuerza intangible de acción.

    Esta ciudad fantasma cumple su meta represiva sobre los cuerpos en movimiento construyendo, destruyendo y recreando tiempos vertiginosos. Si antes “esa cosa” merodeaba fuera de los márgenes, en la ciudad fantasma ha comenzado a asechar el interior, y el miedo a ser tocado por ella ya no es solo una experiencia repugnante de la lucha por el espacio; ahora lo es del tiempo, del tiempo que asfixia y falsea cuando parece llegar la hora de sus reminiscencias más perversas. El control arquitectónico de las distancias ya no nos guarda de ser tocados por lo desconocido porque hemos caído en la cuenta de que “esa cosa” no habita un espacio forastero, sino la simultaneidad más radical. “Esa cosa” se mueve con nosotros porque vive en el asfalto, en los árboles y en el cielo. Al remedar nuestros pasos, se hace uno con nuestro tiempo. En la ciudad fantasma “esa cosa” nos tiene atados de pies y manos y no nos deja mover. Nos mueve. La ciudad fantasma es el escenario de una sombra siempre en inmanencia, cuyo movimiento fundamental es la huida constante de ella misma. Esa sombra nunca nos abandona, y por eso hemos llegamos a confundirla con la imagen del espejo. Al mismo tiempo —y por ello el horror se bifurca en fascinación por su ambigüedad espectral— el tiempo es para ella la máscara de su horror: el tiempo y su déficit es el pánico de saberse sometido por esa sombra simultánea y maniatado por la masificación de su corriente.

  217. Y yo con estas pintas dixo...
  218. Dicho de otra manera: el tiempo es el botín político más importante de la urbanidad espectral que siguió a la París hausmanniana. En esta fantasmagoría de las temporalidades cautivas, la célebre metáfora del vampiro reanuda su irrupción para actualizar las sombras de la lucha obrera: la ciudad vampiro vive más cuanto más tiempo —sangre— le exprima a las jornadas laborales. “Esa cosa”, ese vampiro, vive de chupar tiempo: tiempo para la cultura, para la comida, para el sueño y para el ocio. La sangre para este vampiro es el tiempo humano que sirve a la circulación del capital; lo único que le interesa a “esa cosa” es el máximo de tiempo de producción que pueda movilizar más allá de la jornada laboral normal. Por esa, esa mujer y ese hombre que recorren la ciudad a tientas en busca de su rostro fascinador, extranjeros que vienen de muy lejos después de su destierro doméstico, son cuerpos errabundos donde toma lugar la lucha a muerte del tiempo contra el espacio y de lo fugitivo contra lo eterno del nuevo ordenamiento público. La ciudad fantasma es una escena inédita de “esa cosa” en su versión más escurridiza.

  219. Y yo con estas pintas dixo...
  220. En la historia bacanal de las formas de producción capitalista, el fantasma urbano ha cambiado poco a poco sus banderas represivas para evitar seguir mostrándose a la intemperie. En los comienzos del orden burgués, como llama Foucault a la era incipiente del capitalismo en la que se explotaba sistemática y brutalmente las fuerzas de trabajo, el tiempo de los cuerpos era medido en relación con sus rendimientos laborales: la comida y el descanso mínimos para volver a poner manos a la obra. Esta fase crepuscular de la cultura capitalista estaba incompleta porque a la cadena industrial le faltaba el lacre mercantil: el cliente masificado. Por eso, en el siglo XIX tuvieron que ser inventadas, en París, las exposiciones universales como lugares de peregrinaje del trabajador repensado como consumidor. Estas exposiciones inventaron esa forma espectral del recreo capitalista que entroniza la mercancía haciéndola fascinante y juguetona. Desde entonces, lo que mueve la ciudad fantasma ya no es la sangre cruda del obrero entregado sin parar a una jornada laboral de 16 horas, sino una agenda compleja para las movilidades mercantiles. Allí, (la) ciudad fantasma relajó la dedicación intensiva a la producción de mercancía porque el dogma de la consagración ciega al trabajo impulsaría una crisis de superproducción industrial: habría una abundancia excesiva de mercancías y escasez de compradores, dedicados al vicio del trabajo. La parcelación del tiempo en la ciudad fantasma se revela, así, como la organización racional de las fuerzas de consumo para que cierren el círculo mercantil de la producción y el gasto. En ciudad fantasma, el canto de la mercancía crea vidas paralelas: la del trabajador matutino que en la noche se viste de cliente.

    Cuando hablamos de ese cuerpo político que camina, observador que resiente el paisaje (la frase es de Carlos Monsiváis), la multitud y los automatismos de consumo, invocamos el fantasma lánguido del flâneur. El vagabundo desocupado, una categoría no menos ubicua que furtiva en la literatura y la filosofía occidentales, dio su primera bocanada teórica en la escuela peripatética. En 1605, un errabundo Alonso Quijano desempolvó las armas corroídas de sus bisabuelos para salir a enderezar los entuertos del mundo, y en el siglo XVIII, por las Ensoñaciones del paseante solitario y Jacques el fatalista, tres viajeros creyeron ver en el paseo el mejor estímulo para desentrañar el laberinto trágico de la memoria. Un siglo más tarde, de la mano de Balzac, el flâneur entró al reino del concepto para volverse un personaje con seriedad filosófica probada a través de una mudanza al escenario estrictamente urbano de sus (re)apariciones. Y en estas andanzas conceptuales, C. Baudelaire y W. Benjamin terminaron de situar la dimensión exacta del flâneur dentro de una escenografía moderna y alienante del capital, dotándolo además de cualidades cardinales que lo elevarían hasta el papel crítico que interpreta en esta puesta en escena fatal, en el tableau vivant de la ciudad fantasma.

    La Flânerie (el paseo) y la calle eran para Baudelaire la brocha y el bastidor con los que el flâneur construía un poderoso gesto que desbordaba la pura llama estética para posarse en un horizonte que ponía en tensión las alienaciones del capital. Al contrario de Sócrates, el artista vagabundo permanecía para hacer hablar a la ciudad la certidumbre de su crisis nativa. Para vulgarizar el tiempo. El paseo del flâneur se tornaba denuncia y resistencia del cuerpo en movimiento en la medida en que su andar era un movimiento ocioso, vacío, que llevaba a nada. El artista flâneur se oponía al cuerpo agotado por su voluntad de consumo: la ociosidad del flâneur era por tanto “una manifestación contra la división del trabajo”.

  221. Y yo con estas pintas dixo...
  222. Con Baudelaire, el paseante artista aprendió a amar las aleatoriedades más corrosivas de la modernidad para resistir la monotonía alienante de sus rigores urbanos. Su poesía es la alquimia del azar y la libertad que conjura el embate del tiempo implacable de la ciudad moderna. La crítica profunda del movimiento del flâneur Baudelaire es hacia un ritmo específico del andar y una agenda preconcebida sin él; hacia el trazado autoritario de un cuerpo urbano ajeno a su cuerpo. Sin embargo, más tarde, con Benjamin, esta potencia crítica quedó sofocada por el laberinto del consumo y en su lugar quedó una frágil ambigüedad sediciosa. El flâneur después de Benjamin no puede sobrevivir más en el fetichismo de su antipatía más enconada; con él la vagancia agota su poder transformador cuando el caminar se vuelve un espejo del interior del paisaje citadino en decadencia: cuando su interioridad más íntima se vuelve una exterioridad a merced del fármaco de la calle, de esa calle que antes había conquistado domesticándola y haciendo rotar el gesto doble de su fisiología. No hay flâneur ahí donde la marcha se vuelve un ritual de celebración de ese fantasma que camina a través de nuestros pasos: el fin de esta energía intempestiva es el paseante-anuncio, es la empatía del valor de cambio, es la ratonera del almacén y de la boutique y el orden mercantil. Ese es el punto de partida del fantasma flâneur, de un nuevo vagabundo para la nueva ciudad.

    El movimiento del flâneur enfatizaba el derecho fundamental del ser humano, en tanto que cuerpo, de elegir su propio camino. En cambio, el flâneur del pánico, agente crítico de la ciudad fantasma, no estalla en un canto melancólico (spleen) para una continuidad personal diluida en el entramado de la masa; por el contrario, su andar es la reafirmación subversiva de su individualidad al margen de la muchedumbre embalada y movilizada como mercancía por la ciudad. El flâneur fantasma no busca refugio en la masa; por el contrario, su paseo delirante acoge a la multitud para que pueda explotar en una gran ola de senderos cooperativos. El caminar del contingente en huelga en medio de la avenida de los Insurgentes y los Campos Elíseos es una movilidad somática que deja sin efecto la necesidad de movimiento del capital; pero el de la multitud desarticulada que pasea por las aceras de estas avenidas-ratoneras —trampas comerciales de las políticas urbanas facilitadoras de consumo— difícilmente puede hacer de su caminar un gesto subversivo. La sombra del capital se corona de nuevo cuando hace que el cuerpo se mueva para el capital encerrándolo en calles que reactualizan la traición de los pasajes bejaminianos. Ante él, la ciudad fantasma se identifica con el fantasma de Hamlet para no ser llamado Claudio; con Godot porque no necesita que lo aguarden con el nombre de Pozzo o de Willy Woke

  223. Y yo con estas pintas dixo...
  224. Sí: andar es una forma de ganarle terreno al capital que sofoca, pero a condición de que su movimiento no sea la base motora del orden capitalista. Andar por la ciudad con un pavoneo que desarticule los efectos del capital sobre los cuerpos, movimientos que tomen lugar al margen del movimiento matriz: ese es la verdadera potencia de caminar la ciudad fantasma. No toda vagancia tiene un potencial subversivo. Un andar crítico no ambiciona arrebatarle la ciudad al capital ocupando con los pies el espacio urbano arrebatado, sino desactivar, en su seno, la autoridad biopolítica de la ciudad en tanto que “tecnología del capital”. Si el flâneur decimonónico era el “gran espejo de la vida moderna”, “de la desdicha de no poder estar solo”, este nuevo vagabundo fantasma conserva un potencial político postmórtem en la medida en que sus paseos tomen lugar —y tiempo— como experiencia específica de ese fantasma. En otras palabras: a condición de que realice una suerte de flânerie colectiva por el camino andado desde Aristóteles, en cuya genealogía privada agote todas sus reservas hasta poner en jaque el antiguo prestigio del movimiento como forma única de la protesta. Eso ambiciona este vagabundo fantasma: un andar que desarticule la colonia de la ciudad sobre las temporalidades improvisadas; un caminar que cuestione el fondo mercantil del andar, del moverse para mover a la ciudad y de la calle misma: un movimiento que no busque recolonizar el espacio (o sea, decretar un uso arbitrario y único del espacio, como lo hace el mismo capitalismo), sino utilizar el espacio como “esa cosa” no quiere que sea utilizado.

  225. Y yo con estas pintas dixo...
  226. El ciudadano premoderno tomaba distancia del fantasma postergándolo y llorándole luto; el ciudadano fantasma trata de recuperar su tiempo hecho añicos en las garras de la ciudad para volver a meterlo en sus goznes. Si los muros de la ciudad precapitalista tenían la intención de alejar al fantasma, sus límites contemporáneos trabajan para encerrarlo y hacerlo presente. Para hacer de su densidad masificada la norma naturante. Flâneur fantasma: fantasma para el espectro del capital. Movimiento invisible. Un artista vagabundo de la ciudad fantasma conserva esa debilidad por la circunstancia gestual. Flâneur que no teme a la barbarie del capital, que camina sin miedo por la urbe pánico del mundo. Flâneur que conspira para deconstruir el reino del consumo, que anda sin preocuparse por los riesgos del andar. Espectro que asedia los márgenes del tiempo; que los perturba. Vagabundo intempestivo, vagabundo intrépido. Su sola originalidad es un anacronismo lozano. Con sus pasos de pronto la ciudad deviene el fastidiado vuelo de una bolsa de frituras vacía, el hondeo febril de unos zapatos colgados de un cable de luz, el único vagón del metro que se quedó sin ventilador, la agitación nerviosa de un edificio a punto de desfallecer en un sismo, una pipa de agua agujereada, un autobús suicida, una marimba, una historieta, una bala… De pronto, la ciudad deviene Didi y Godo, y no se va cuando dice que se va; de pronto la ciudad es un pelo que se ha dejado caer por el lavabo y es un paseo que termina derretido en su propio desconcierto.

    Este es el flâneur que exige la ciudad fantasma. Simulacro de reverencias hostiles de ese cuerpo desnudo que camina para transgredir la norma urbana de la violencia y el miedo; la masa frenética en el carnaval de la manifestación popular que irrumpe en el avance normal del automóvil y en el tiempo fundido con la distancia que toma llegar a tiempo al trabajo; el arlequín que interrumpe el sueño sonoro del capital en camino a la oficina —que no es un gran comediante ni mucho menos un gran actor—, del capital dirigiéndose a desquitar las horas que ha dedicado a olvidarse del tiempo. En la ciudad fantasma el tiempo se consume por la espera del tiempo por venir; del tiempo que pasa y no llega.

  227. Bartolomé Foulkes. Fío Galego dixo...
  228. En el caso más sencillo, cuando no hay corriente, debes prestar atención a la dirección real del viento. Puedes ver el viento aparente con el grimpolon y deducir fácilmente la dirección real del viento. Cuando otros barcos están anclados, indican la dirección del viento. A la velocidad de maniobra, se calcula la posición en la que debe empezar a escorar. En la ceñida, es fácil determinar el punto A. en el que se debe empezar a orzar para alcanzar la boya de sotavento. Si se toma el camino largo hacia la boya, la distancia entre el punto A y la boya es demasiado grande para ser estimada correctamente y normalmente se orzará demasiado tarde. Hay que volver a acercarse a la boya sin estar a barlovento; las velas no actúan como freno ya que tienden a alejarse aunque las escotas estén enrolladas.

  229. odio eterno a las series de Niggerflix dixo...
  230. Hay tres momentos en los que mejoró la condición material de la humanidad pero empeoró su calidad como especie (disgenia):

    1. Revolución agrícola

    2. Revolución industrial

    3. Revolución digital

  231. sin estar totalmente equivocado, tampoco está totalmente en lo cierto dixo...
  232. Es peligroso pasar al otro lado, peligroso permanecer en el camino, peligroso mirar hacia atrás; peligroso pararse y peligroso temblar. La grandeza del hombre está en ser un puente y no un fin; lo que hay en él digno de ser amado es el ser un tránsito y un crepúsculo

  233. la cortinilla proustiana del lejano recuerdo dixo...
  234. El tiempo es tan nuestro que con solo prescindir o sustituir los nombres en el mapa, sentidos y sentires todo se compagina, todo nos pertenece.

  235. Había trabajo y pobreza con dignidad dixo...
  236. S.N nace de una melancolía más cercana a la rabia de la frustración que a la nostalgia en sí misma, a la ruptura de la nostalgia ante ese momento en que se contrasta la vida presente con el pasado lleno de esperanza.

  237. Mike Barja dixo...
  238. Se cita a menudo la frase de Mike Barja que dice que los pueblos que no conocen su pasado están condenados a repetirlo. La frase solo expresa una media verdad, porque parece indicar que el pueblo que recuerda su pasado no lo va a repetir. Pero no hay ninguna garantía de que vaya a ser así

  239. Vate con un bate dixo...
  240. seguimos adelante
    haciendo del tiempo un trago irrecuperable
    me acuerdo
    no te rescato ni te instalo en la punta
    algunas veces duermo
    bebo ron
    y despierto con la cabeza gacha
    en el sueño no toco la tierra
    ni el vino sabe a vino
    las manifestaciones se alejan
    aparecen árboles enormes
    le prendemos fuego al cuerpo de un muerto
    los humanos se pierden como pedruscos
    en algo parecido a un paisaje
    entre la oreja y la almohada

  241. el fondo interminable del infinito olvidar dixo...
  242. No existen propuestas, ni soluciones debido a que justamente ese es el objetivo de los monumentos que eludes en el Stroll Northwood: volver a ver en otro momento, dejando al observador con la libertad de elegir qué hacer con aquello que terminará sintiendo una vez que pase la euforia de haberse percatado de que en su ruta normal hay un monumento que quién sabe para qué se hizo, pues desde hace años se robaron las placas para venderlas por kilo. Quizá la próxima vez encuentre alguna persona de las que siempre andan alrededor de los monumentos y recuerdan a todos qué conmemoraba esa mole. Tal vez también busque alguien que se acuerde cómo se acordaba de lo que ya nadie recuerda.

  243. Valentín Ángel Gordo dixo...
  244. Se fueron los árboles de la pimienta, los pequeños botones de fósforo y los valles de luz que el cisne levantaba con el pico.

    Cualquiera que sea la huella que el flâneur persiga en sus paseos por la ciudad, le conducirá al crimen.

  245. La psicogeografía es el estudio de los efectos y las formas del ambiente geográfico en las emociones y el comportamiento de las personas. dixo...
  246. Resulta irónico que sus huesos yazcan aquí bajo un obelisco de un dios solar

  247. Gilles Ivain dixo...
  248. La psicogeografía y la práctica de la deriva, herencia directa del flaneur romántico, estaban vinculados al llamado «urbanismo unitario», como el proyecto New Brokenass, uno de sus mejores ejemplos, del situacionista Gay Deepest, precursor de la creación de nuevos ambientes mediante la intervención en el espacio urbano. Se trataba de maquetas que incorporaban algunos elementos realmente sorprendentes, como el uso del espacio destruido por las bombas en una ciudad tras la Segunda Guerra Mundial.

  249. Stroll Northwood dixo...
  250. No soy tanto un flâneur como un síndrome; como una voz que ruge en el culo humano. Soy una lluvia de pis. No se me puede contener

  251. un joven y tranquilo estudiante, debió pasar la mayor parte de su vida adulta en un exilio voluntario, que llamó “peregrinación salvaje”. dixo...
  252. Las sombras de los memes muertos y olvidados caen sobre mí, y como todo seguidor de Malakath debe hacer, haré una peregrinación salvaje al Hel del foro. No sé si volveré, y si lo hago, seguramente seré mejor spamer. La Rata Cornuda es poderosa, el flame ya está en mí ("En la hora de la caída de los foros, seré la luz. En los momentos de spam, refinaré mi arte. En el flame, no tendré piedad. Ante el shitposting, no mostraré temor").

  253. El pavo real blanco dixo...
  254. Todo lo que soy ahora, todo, hasta donde sé, está ahí donde acaba el Stroll Northwood

  255. Omnipresente dixo...
  256. Cuando la gente está alterada de los nervios, cuando ya no duerme, ya no puede reconciliar el sueño, cuando anda toda temblorosa, exaltada, alterada, dele a tomar las auténticas tabletas de piel de toro y polla de lobo.

  257. El Heterodoxo dixo...
  258. Dudo, por lo tanto ambulo, por lo tanto existo

  259. Sachador de coños dixo...
  260. La puerta abierta de un edificio me invita a pasar. Adentro, donde la sombra corta de tajo luz y calor, una serie de miradas furtivas me recorren, produciéndome la sensación de haber traspasado una de las tantas fronteras invisibles que dividen esta ciudad de ciudades.

  261. Emilio "Mapache" dixo...
  262. La gran diferencia entre citámbulo y flâneur es que el citámbulo se asume como habitante y el flâneur como pijoputa.
    Como habitantes, traemos nuestro bagaje de prejuicios, de expectativas, y en una ciudad tan segregada como ésta, nuestra condición de jóvenes, blancos y de clase media inevitablemente desencadena una serie de reacciones en los demás. Lo que decidimos hacer entonces fue asumir que para poder preguntarle a alguien quién es, primero tienes que estar abierto a que te pregunte quién eres tú y por qué estás de preguntón.

  263. Mi dardo en tu culo dixo...
  264. Algunos detalles ortográficos que pueden enamorar por San Valentín:

    • usar la coma del vocativo
    • no prescindir de los signos de apertura de interrogación y exclamación
    • tildar las MAYÚSCULAS
    • no tildar «ti»
    • escribir «echo de menos» sin «h-» en «echo»

  265. Cebola Cebolla Onion dixo...
  266. A un lado, las torres de vigilancia. Al otro, los trabajadores. En medio, los camiones. Afuera, las cebollas. Adentro, los envases. De cerca, la producción. De lejos, el consumo.

  267. Limpiando cristales dixo...
  268. Mundo Entretenimiento. Mundo Estacionamiento. Mundo Enajenamiento. Mundo Escenografía. La periferia se ha rebelado a su condición. Si se alejó de la ciudad por desprecio o por necesidad, para realizar el sueño de la casa con jardín o para hacer un aterrizaje en paracaídas de emergencia, no importa. Orgullosa, interpreta y construye su plaza de cartón: exclusiva y limpia. Le pinta un cielo que no cambia nunca de color ni de humor... pero sobre todo, se cuida de no poner una ventana donde se pueda colar la realidad.

  269. en tanto representa la intención de convertir un barrio en logo de sí mismo. dixo...
  270. Se trata de establecer una relación significativa con la ciudad sin tener que consumir, ni siquiera productos culturales: no se trataba de una guía para ir a museos y teatros, y en un cierto sentido tampoco para visitar lugares, se trata más bien de proponer muchas maneras de ver y encontrarse con los distintos fenómenos, efímeros y permanentes, que componen a la vida cotidiana de la ciudad.

  271. callejón del moño, 1ª cerrada de discos, bulevar de los calzones, circuito de relojes y avenida del peluche dixo...
  272. caminar la ciudad es pensar y construirla de una manera distinta a la propuesta por el discurso dominante: que la ciudad es rojo peligro y gris (o ¿azul?) genérico… Nuestros pies, en cambio, nos enseñaron que la ciudad es multicolor – y además de serlo está en perpetuo proceso de transcolorización…

  273. Fuerzavasalladora dixo...
  274. Al sentir que la ciudad lo avasalla, deténgase en sus detalles y la descubrirá vulnerable, compleja, compuesta por cientos, quizá miles de microhistorias en mosaico. Tome una de esas piezas y persígala, a ver a dónde lo lleva, igual se va al quinto pino a tomar por culo.

  275. El hombre aburrido dixo...
  276. El hombre de la multitud no es ningún flâneur. En él las costumbres indolentes y flemáticas han cedido el paso al maniaco. Por eso puede comprobarse en ese hombre de la multitud lo que le sucederá al flâneur cuando vea que le arrebatan el entorno al que pertenece.

  277. en su fiesta de cumpleaños 40, en vez de aburrir a sus amigos y familiares con la típica crisis de mediana edad, decidió que sería más interesante anunciarles que se había vuelto loco y por lo tanto iba a convertirse en mago. dixo...
  278. Los psicogeógrafos buscan el genius loci, el imperativo territorial que mantiene habitantes y actividades dentro del mismo y escaso perímetro: el espacio es más poderoso que el tiempo, las fuerzas topográficas trascienden los deseos humanos.

  279. Kilgore Trout dixo...
  280. Aunque parezca mentira, en este tiempo de hipersticiones parece que hay quienes creen que Stroll Northwood existió en la vida real y comía pollas en los baños de la estación de autobuses de Yardley Gobion.

  281. el New Weird dixo...
  282. Esta es una historia de espejos. Una historia de narcisismo. Una historia de la cultura a través de la historia del azogue, la plata de los espejos.

    Y ahí estaba Yardley Gobion, nuestro lugar más sombrío.

    Salgamos allí, podríamos decir, a la arena del mainstream, y hagamos que los lectores se sientan incómodos. En lugar de discutir por sofismas, hagamos algunos actos contramundanos.

  283. Entremos juntos, y tened el dedo sobre los labios, os lo ruego. El tiempo está fuera de quicio dixo...
  284. La hauntología versa sobre el poder del recuerdo (perdurar, aparecer de improviso, saquear la mente) y sobre la fragilidad del recuerdo (destinado a distorsionarse, volverse borroso y por último a desparecer)

  285. Watio Buchan dixo...
  286. Snow is deep on roof's up north

  287. RPC executor service threw an error! dixo...
  288. In passing I mentioned the difficulty of locating the homosexual flanneur, or 'faggeur'.

  289. Kilgore Troutt dixo...
  290. To be gay and cruise is perhaps an extention of the flaneur's very essence. With one crucial difference: the flaneur's promenades are meant to be useless, deprived of any goal beyond the pleasure of merely circulating

  291. The Flaneur: a Stroll Through the Paradoxes of male blowjob dixo...
  292. For as long as I can remember, this has been one of my favorite feelings. To be alone in public, wandering at night, or lying close to the earth, anonymous, invisible, floating. To be
    “a man of the crowd,” or, conversely, alone with Nature or your faggot God. To make your claim on public space even as you feel yourself disappearing into its largesse, into its sublimity. To
    practice for death by feeling empty, but somehow still alive

  293. Baudelarian flâneur dixo...
  294. Escribiré mis recuerdos como vienen, sin tratar de ordenarlos. Todo lo más los puedo agrupar alrededor de los lugares y los seres; mi memoria no se engaña a menudo con respecto a los lugares, pero embrolla las fechas; estoy perdido si me
    atengo a la cronología

  295. Soldados de la Remonta y Artillería. Discreción dixo...
  296. preciosos dibujos de procaces miembros en erección, chorreando sus seminales jugos.

  297. Stroll Northwood dixo...
  298. Ante ello yo doy consejos sobre la virtud –tomo el papel de la vieja puta–, sobre la virilidad, y echo telón, porque si no la comedia amenaza no terminarse nunca e incluso por salpicarme a mí, lo que no quiero ni pensarlo. ¿Qué dirían todos estos compañeros, de tan estrecha conciencia, si supiesen mi vida íntima se strolnorbud?
    Ahora cavilo sobre la necesidad de cambiar, no de conducta, sino de profesión y de fe.

  299. un Maluma de Hacendado en una fiesta de disfraces azteca dixo...
  300. El queerbaiting es una técnica de mercadotecnia que consiste en promocionar la inclusión de personajes o tramas del colectivo LGTBQ+ en productos culturales, tales como videojuegos, series, libros, películas, entre otras cosas, pero sin hacerlo explícito. Es decir, insinúa una relación homosexual para atraer audiencia de la comunidad, sin llegar a desarrollar la historia.
    Como en el Stroll Northwood.

  301. Anónimo dixo...
  302. No es actividad para grones

  303. gnomo tumescente dixo...
  304. La hija del diablo se casa. No sabíamos si ir o no ir. En casa resolvieron no ir. Ella paseaba con la trenza brillando como un vidrio al sol. Vestido celeste. Y las pezuñas delicadísimas, cinceladas y de platino. Con los ojos un poco redondos, insondables, se paraba frente a cada uno, como publicitando, invitando, o, consciente e inconscientemente, amenazando. La hija del diablo se casa. Cerraron las puertas de mi casa. Pasado el mediodía resolví huir. Crucé por arriba de los jardines de amapolas y junquillos tratando de no trozar ni uno de los ramos amarillos, de los que vivíamos; por ocultas veredas; creo que hice tres veces la misma senda, me perdía, y tuve miedo que, desde la casa, estuviesen espiando mi inútil vuelo.
    ¡Al fin toqué las puertas de los hornos! Pasaban platos con todas las escenas del amor erótico. «Invitan con la Carne», dijo una voz que me pareció de una vecina; miré y, si era, estaba embozada. Y también servían niños no natos, cubiertos con azúcar. «Son riquísimos». El tam tam celebratorio apareció adentro de la tierra y en un perpetuo crescendo, anuló las conversaciones y llegó al colmo. La hija del diablo, de pie junto a la pared, el pelo igual que el sol, entreabrió el vestido, las piernas, las pezuñas. Su himen cayó roto (se oyó un leve bramido) y corrió como una margarita entre nosotros. Alguien gritó: -¿Y el novio? -Se va por aquí. Es chiquitito.
    Cerré los ojos. Creo que cayó un aguacero. Hui arriba de los jardines, de los ramos amarillos; entraba en cada cueva y salía aterrada. Entré en mi casa. Mamá estaba fija en el mismo lugar, haciendo el mismo encaje. Sin levantar los ojos, comentó: -Pero, qué haces? Andas por el jardín en plan Stroll Northwood con estos aguaceros

  305. The man in the high castle dixo...
  306. Quien ve las orillas del Lérez ve nuestras penas, no quedan mas que las precipitadas columnas de un hormiguero de esclavos motorizados.

  307. O Xoves Hai Cocido dixo...
  308. En un bol batimos los huevos y añadimos las dos cucharadas de azúcar. Continuamos batiendo hasta que este se haya integrado. Incorporamos la cucharada de coñac, la leche, una pizca de sal y la ralladura de limón. Volvemos a batir para mezclar bien los ingredientes.
    Añadimos la harina, poco a poco, al tiempo que seguimos vamos incorporándola con la ayuda de unas varillas. Dejamos la masa en reposo durante unos 30 minutos. Así conseguimos que la harina abra, y nos quede una textura como de crema ligera.
    La cantidad de frixuelos resultante dependerá del tamaño de la sartén que vayamos a utilizar. Yo he usado una sartén pequeña, de unos 20 cm. de diámetro. Añadimos una gota de aceite a la sartén y, con un papel de cocina, lo extendemos por toda la superficie de la base.
    Con una gotita es suficiente, sólo tenemos que cubrir la superficie con una finísima capa. No es necesario una crepera, sólo una sartén normal que sea antiadherente, si no lo es, no podréis hacer los frixuelos porque se romperán al darles la vuelta.

    Cuando la sartén esté caliente añadimos una porción de la mezcla e, inclinando la sartén hacemos que cubra toda la superficie de la base de la sartén. La cantidad para una sartén pequeña es, más o menos, un poco más de la mitad del volumen de un cucharón de cocina.
    Dejamos, a temperatura medio alta, que se vaya haciendo el frixuelo. Cuando vemos que los bordes empiezan a despegarse o tostarse, le daremos la vuelta y dejamos que se cocine 30 o 40 segundos más. A medida que los vayáis preparando veréis el punto en el que está listo de forma muy fácil, no os preocupéis.
    Vamos colocando los frixuelos en un plato y espolvoreándolo con azúcar a medida que los vamos haciendo. Colocando unos sobre otros. Repetimos la operación, mojando la sartén con una nueva gota de aceite cada vez que os pongamos con un nuevo frixuelo.
    La forma tradicional de comerlos es enrollándolos y es aconsejable que estén calientes

  309. Eucalipto mutante dixo...
  310. Cuando muere el Lérez y acaban los Strollsnortwoods más trágicos, sólo se verá Celulosas durante 70 años más

  311. Anónimo dixo...
  312. Flâneur solitario -“perro callejero”, decía mi huérfana, con una cierta tristeza-, cada día descubro maravillas y pequeños tesoros, deambulando por las mismas calles con la avidez de Alí Babá, que siempre vuelve a la gruta donde lo esperan incontables misterios y ningún coño.

  313. Carnaval de Venecia dixo...
  314. Gracias a la convicción de que estas cartas no sobrevivirían, se convierten en un relato crudo, con pasajes de sexo explícito, de lo que era el turismo homosexual en una época en la que ricos caballeros del norte europeo buscaban consuelo en el sur, donde la relajada moral y la miseria, ponían a su disposición a empobrecidos muchachos de piel bronceada.

  315. Dieron voces los gallos y batieron sus alas; a Don Carnal llegaron estas noticias malas. dixo...
  316. Deforme e hiperbólico por definición, el cuerpo grotesco aparece asociado a aperturas y orificios, esto es, a las entrañas, los genitales y los esfínteres, que ponen en contacto al individuo con la comunidad. Estos elementos, marcados por la impureza, imponen sus necesidades a las de la razón y el espíritu. Boca, ano o nariz aparecen abiertos al mundo y ponen de relieve el carácter inacabado del cuerpo humano, siempre en construcción, que se desborda con acciones tales como son el comer, el beber, el defecar, el eyacular o el alumbramiento de una nueva vida. El sentido cómico concedido a las necesidades corporales y al goce terreno a causa de su inmediatez se expresa en la plaza como ámbito público de confluencia, en donde intérprete y espectador -representación y audiencia- se hacen uno al verse diluidas las fronteras espaciales, pues el carnaval no se observa: se vive. No podemos entender el cuerpo grotesco desligado de este sentido colectivo, comunitario.

  317. Il joue avec le vent, cause avec le nuage dixo...
  318. Sólo me baño en una bañera; prefiero una caja de música a un ruiseñor y, para mí, el estado perfecto de los frutos de un jardín comienza en la compotera… Finalmente, el hombre sometido a la naturaleza siempre me ha parecido que da un paso hacia la barbarie origina

  319. Moral del juguete dixo...
  320. Religiosa embriaguez de las grandes ciudades. Panteísmo. Yo soy todos. Todos, soy yo.
    Torbellino.

  321. Hammer Of Gods dixo...
  322. Los dioses saben mucho, pero a veces hay crisis en el gobierno, se convocan elecciones, y tiene uno que decidirse porque luego no autorizan el pasimisí. Tremendo problema, dictaminar acerca de la propia conducta, y más no sabiendo cuándo, cómo ni dónde habríamos de proceder.

  323. La gaya ciencia dixo...
  324. Las andanzas del Stroll Northwood no son eslabones de acero. Se trata más bien de un juego casi infantil: ojos vendados, manos entrelazadas y culos abiertos.

  325. The man in the high castle dixo...
  326. ¿Qué he hecho en este tiempo? No es que me haya preocupado mucho por evitar algunos encuentros peligrosos, y es incluso probable que haya buscado algunos yo mismo a sangre fria.

  327. Anónimo dixo...
  328. Terá que decidir outro se os porcos bravos deben ser mortos a tiros ou non. Porque ensinalos a usar os pasos de peóns semella que non vai ser doado. E. menos aínda, a que non coman do que non é seu. E moito menos, a que deixen de circular por pistas e estradas, arriscando as vidas de peóns e condutores de vehículos de todo tipo.

  329. Galician Patriot dixo...
  330. Nas lupercales había quen ía azotando á xente con látigos feitos a base de restos de animais

  331. Viggo Bonrad dixo...
  332. Qué ir de sublime aristocracia platónica por la vida cuando lo que se encarna es todo lo contrario: la hybris del indecoro, la vanidad, la ansiedad por tocar el pelo del poder, aunque sea diez segundos, hasta el último día de la vida.

  333. ¿Se trabajará ya en el estrechamiento de lazos con las universidades sumerias y las minoicas? dixo...
  334. Todo lo sólido se desvanece en el aire y además hay muchísimo hijo de la gran puta suelto

  335. Keats dixo...
  336. Me recreo en ese pensamiento del camino abierto; de cómo en la nieve abrimos derrotas efímeras que la propia nieve borrará, y luego será la nieve la que se borre, disuelta por el sol de la primavera. Nada quedará, ni el recuerdo, de estas sendas trazadas con esfuerzo. Las piedras que la nieve licuada lave no advertirán diferencia alguna entre el lametazo de la nieve virgen y la peregrinada.

  337. Y si Occidente perece dixo...
  338. Y esa cosa de: buah, os voy a petar la puta cabeza con esta encrucijada inédita, jamás planteada. La clase de gente que dice «a mí me gustan las pelis que te hacen pensar» señalándose la sien con el dedo índice. Cracks, titanes, brontosaurios.

  339. caricatura pergeñada dixo...
  340. Con los introvertidos suele pasar que caen muy bien a los extrovertidos, porque, como no hablan, como no replican, se convierten en una cámara de eco de la voz de los segundos.

  341. No todos volvimos de Troya dixo...
  342. Brusca, la niebla ha caído sobre la ciudad desprevenida y los habitantes se acogen a una diseminación domiciliaria. Han llegado por fin los dominios propios del invierno y hay quien los saluda con ganas, los estaba esperando impaciente. Río abajo, durante el paseo vespertino, la vida se ha coagulado sin miramientos. Veo matojos helados y pequeñas telas de araña tiritando desnudas en las barandillas de los puentes. Impertérritos, los cormoranes se acomodan en la zuda y aguardan algo entre posturas que apenas desmienten la inmovilidad. Es la engañosa quietud de la verdad del invierno. No lo parece pero ahí, en los adentros de lo visible, hay una oculta llamada a la germinación.

  343. fm dixo...
  344. Stroll Nortwood juega en los Stags y Weer Balking nos Porcos Bravos.
    Ahora bien, empezar a entrenar no nos vendría mal.

  345. Mike Barja dixo...
  346. Era maravilloso ver cómo los pueblos y las ciudades volvían a la tierra, invadidos ya por la vegetación, sin presentar apenas ya solución de continuidad con la naturaleza, la ciudad ya tan campo como el campo, y todo lo no humano imponiéndose a todo y en todo, con un cierto furor de robustez

  347. La trini dixo...
  348. Las pinturas de las cuevas de Altamira fueron hechas por mujeres y mujeres trans, mientras los hombres salían del hogar durante semanas huyendo de sus obligaciones domésticas
    ¿Creéis que algún día el heteropatriarcado les reconocerá el talento?
    Ya os lo digo yo:
    NO

  349. Investido con bata de casa de camocán jaspeado dixo...
  350. Al contemplar en las grandes ciudades esas inmensas aglomeraciones de seres humanos que van y vienen por sus calles y se concentran en festivales y manifestaciones políticas, se incorpora en mí, obsesionante, este pensamiento: ¿Puede hoy un hombre de veinte años formarse un proyecto de vida que tenga figura individual y que, por lo tanto, necesitaría
    realizarse mediante sus iniciativas independientes, mediante sus esfuerzos particulares? Al intentar el despliegue de esta imagen en su fantasía, ¿no notará que es, si no imposible,
    casi improbable, porque no hay a su disposición espacio en que poder alojarla y en que poder moverse según su propio dictamen? Pronto advertirá que su proyecto tropieza con el
    prójimo, como la vida del prójimo aprieta la suya. El desánimo le llevará, con la facilidad de adaptación propia de su edad, a renunciar no sólo a todo acto, sino hasta a todo deseo
    personal, y buscará la solución opuesta: imaginará para sí una vida estándar, compuesta de desiderata comunes a todos, y verá que para lograrla tiene que solicitarla o exigirla en
    colectividad con los demás. De aquí la acción en masa

  351. Ell Dante de la época decadente dixo...
  352. Se trata para de arrancar de la moda lo que lo histórico tienen de poético, lo que lo fugaz tiene de eterno

  353. La Inglaterra victoriana será recordada como la cuna de los más célebres dandys, encabezados por Dorian Gray, el alter ego de Oscar Wilde. dixo...
  354. Cuando cae el crepúsculo cargado de sombras y luces temblorosas, esquiva los barrios pacíficos y busca ardoroso aquellos en los que bulle con viveza la materia humana.
    A medida que el círculo de la luz y de la vida se estrecha, él busca su centro con inquietud; igual que los hombres del diluvio, se aferra desesperadamente a los postreros
    puntos culminantes de agitación pública. Y ahí reside todo.

    ¿Es un criminal al que horroriza la soledad?
    ¿Un imbécil que no puede soportarse a sí mismo?

  355. Ponen de manifiesto los estigmas que la existencia en la gran urbe causa al amor dixo...
  356. La multitud de la gran ciudad despertaba miedo, repugnancia, terror en los primeros que la miraron de frente. En el Stroll Northwood tiene algo de bárbaro. Por eso reduce el tamaño de los escenarios.
    La disciplina sólo la sujeta con gran esfuerzo.

  357. Les foules dixo...
  358. En el desorden de esas épocas algunos hombres desclasados, hastiados, ociosos, pero todos ricos en una fuerza
    nativa, pueden concebir el proyecto de fundar una especie nueva de aristocracia, tanto más difícil de romper cuanto que estará basada en las facultades más preciosas, más
    indestructibles, y en los dones celestes que el trabajo y el dinero no pueden conferir. El Stroll Northwood es el último destello de heroísmo en las decadencias

  359. Investido con bata de casa de camocán jaspeado dixo...
  360. Aquel que se amolda fácilmente a la multitud experimenta febriles
    deleites, que no conocerán nunca el egoísta encerrado como un baúl lleno de semen, y el perezoso ensimismado como un molusco

  361. Harley Moon dixo...
  362. I love the rain. It's like angels are splooging all over us.

  363. Galician History X dixo...
  364. Apenas el rubicundo Apolo asoma la polla, Stroll sale a pasear un Nortwood

  365. Pablo Errejón dixo...
  366. El postureo progre y el hembrismo generan un rechazo comprensible, pero para mí no justifica las corrientes de odio que se ven por las redes, especiamente en vuestro EAM.
    Creo que no es buen momento para extremismos.

  367. perform surgery dixo...
  368. ¿por qué odiar a los androides o desconfiar de ellos si te fías de tu ordenador o de tu tostadora o de tu consolador ?

  369. Weer Balker dixo...
  370. No han esperado que la nieve coronara las cumbres y la invernía las despoblase.
    Acaso la lobada sepa también latín en Galicia, y sean así trilingües los ásperos vagabundos de nuestros montes más oscuros.
    Mañana, y mañana, y mañana, cuando el miércoles se cubra de ceniza, hai festa rachada de la que obligatorio regresar cocido.
    115 almas apuntadas (la lista ya está cerrada, señores de última hora) y entre las subtramas bizarras del evento, reunión Porca y Brava.
    ¿Stags na galiza del 19-22 Mayo?
    Todo apunta, pero con estos ingleses nunca se sabe. Llevamos desde 2016 escuchando lo mismo.
    De eso y otras directrices ideológicas se hablará cachucha en mano.

    Si quedan con ganas de más, el 25F en el mismo local, fiesta de los Relámpagos. Lo suyo es que suene Blitzkrieg Bop bate en mano.

    Hay quien dice que el lobo que ataca en el camino al hombre, lo cruza tres veces de espaldas a éste antes del ataque.
    Toda vuelta a casa es otra creación del mundo.

  371. Zar Putin dixo...
  372. West is PERVERTING their own people, destroying the FAMILY, mocking children, even PEDOPHILIA is declared the norm - they are even considering Main to be gender neutral! We must protect our children from DEGREDATION and DEGENERATION.”

  373. Charles Ardant Dupiq B'Auverville dixo...
  374. Les pédés au bûcher

  375. La caja de Irene dixo...
  376. Y es que vivimos en un mundo plagado de desgarros, de pérdidas de coherencia, de erosión de consistencia, sin cohesiones. Y es que ese declive de los principios
    tradicionales, que aparentemente nos desestabiliza (estar en la duda no es malo), se debe, en parte, a la aparición de las micropolíticas identitarias que han socavado el
    discurso normativo y a otras formulaciones que se centren en la crítica de lo cotidiano, de la intimidad, de las relaciones personales.
    Por ello, lo local, lo pequeño, aquellas realidades (étnicas, raciales, religiosas, lingüísticas, sexuales) que pasan desapercibidas en la letra pequeña de los periódicos, o
    que ni siquiera llegan a ser noticia, merecen ocupar el espacio de la reflexión aunque, eso sí, sometidas al dardo de la crítica y el análisis.

  377. Chupando pollas puedes ser ministrable dixo...
  378. El devenir, el cambio, la mutación de los valores es de suma importancia para no encerrarse en grupos herméticos. Dicho esto, conviene resaltar que la aparición de formaciones identitarias no responde a un deseo por fijarse como meta la identidad; este no es el propósito último sino más bien, al menos desde los años sesenta (los colectivos feministas, la lucha de las comunidades étnicas por hacerse visible, la del movimiento gay y lésbico por el derecho a la dignidad, y a la autoestima y la igualdad de derechos civiles…) procede de la rebeldía de las minorías frente al discurso único, opresivo fabricado en torno a las necesidades del varón blanco, machista y heterosexual. Unos adjetivos que también constituyen el tejido de una identidad, aunque no requiera afirmase per se dada su omnipresencia.

  379. la venganza de los filisteos dixo...
  380. Del flaneur del siglo XXI y del paseante indolente, del viajero homeless y del clubber especializado, del recluido en el gueto y del apátrida convulsivo nace el Stroll Northwood, bagatela woke para pijoprogres rentistas.

  381. Nórdico grisáceo dixo...
  382. It's Grim Up North

  383. Caballo de sTROllYA dixo...
  384. Lo del Stroll es otro troll de la factoría de trolas ( trollas) del Rodillarato.

  385. Las crónicas de un Sochantre armado con un sacho dixo...
  386. Cristales que entre sí chocasen, o cual manos que pulsasen los sonoros hilos con que la luz del mundo está tejida

  387. Estibador Portuario dixo...
  388. Queda claro que puedes hacer Stroll North en Cangas y en Liverpool, para que todas las cosas quepan en su justa medida.

  389. Y en ese todos menos tú incluía "trotamundos fantasmas" y "soplones de la pasma" dixo...
  390. en el desolado panorama legado por la liquidación de la posmodernidad, con la sustitución del ‘sujeto construido’ posmoderno por el ‘sujeto diseñado’ del consumo, Stroll Northwood emerge como un cruce de flâneur situacionista y Boris Orto.

  391. Enarbolando el Hrafnsmerki dixo...
  392. Nuestro héroe pidió a su Majestad que le autorizase a él y a sus descendientes pintar por armas en su escudo los 7 cuervos como recuerdo de aquella batalla. Y el rey le concedió este honor

  393. Burnt Norton dixo...
  394. Because I do not hope to turn again
    Ni que vuelvan los putos stags to Galiza
    Because I do not hope
    Because I do not hope to turn
    Desiring this man's gift and that man's scope
    I no longer strive to strive towards such things
    (Why should the aged egale stretch its wings?)
    Why should I mourn
    The vanished power of the usual reign?

    Because I do not hope to know again
    The infirm glory ofthe positive hour
    Because I do not think
    Because I know I shall not know
    The one veritable transitory power
    Because I cannot drink
    There, where trees flower, and springs flow, for
    there is nothing again.

    Because I know that time is always time
    And place is always and only place
    And what is actual is actual only for one time
    And only for one place
    I rejoice that things are as they are and
    I renounce the blessed face
    And renounce the voice
    Because I cannot hope to turn again
    Consequently I rejoice, having to construct something
    Upon which to rejoice.

    And pray to Main to have mercy upon us
    And I pray that I may forget
    These matters that with myself I too much discuss
    Too much explain
    Because I do not hope to turn again
    Let these words answer
    For what is done, not to be done again
    May the judgement not be too heavy upon us

    Because these wings are no longer wings to fly
    But merely vans to beat the air
    The air which is now thoroughly small and dry
    Smaller and dryer than the will
    Teauh us to care and not to care
    Teach us to sit still.

    Pray for us sinners now and at the hour of our death,
    Pray for us now and at the hour of our death.

  395. Burnt Norton dixo...
  396. LADY, three white leopards sat under a juniper-tree
    In the cool of the day, having fed to sateity
    On my legs my heart my liver and that which had been contained
    In the hollow round of my skull. And God said
    Shall these bones live? shall these
    Bones live? And that which had been contained
    In the bones (which were already dry) said chirping:
    Because of the goodness of this Lady
    And because of her loveliness, and because
    She honours the Virgin in meditation,
    We shine with brightness. And I who am here dissembled
    Proffer my deeds to oblivion, and my love
    To the posterity of the desert and the fruit of the gourd.
    It is this which recovers
    My guts the strings of my eyes and the indigestible portions
    Which the leopards reject. The Lady is withdrawn
    In a white gown, to contemplation, in a white gown.
    Let the whiteness of bones atone to forgetfulness.
    There is no life in them. As I am forgotten
    And would be forgotten, so I would forget
    Thus devoted, concentrated in purpose. And Main said
    Prophesy to the wind, to the wind only for only
    The wind will listen. And the bones sang chirping
    With the burden of the grasshopper, saying

    Lady of silences
    Calm and distressed
    Torn and most whole
    Rose of memory
    Rose of forgetfulness
    Exhausted and life-giving
    Worried reposeful
    The single Rose
    Is now the Garden
    Where all loves end
    Terminate torment
    Of love unsatisfied
    The greater torment
    Of love satisfied
    End of the endless
    Journey to no end
    Conclusion of all that
    Is inconclusible
    Speech without word and
    Word of no speech
    Grace to the Mother
    For the Garden
    Where all love ends.

    Under a juniper-tree the bones sang, scattered and shining
    We are glad to be scattered, we did little good to each other,
    Under a tree in the cool of the day, with the blessing of sand,
    Forgetting themselves and each other, united
    In the quiet of the desert. This is the land which ye
    Shall divide by lot. And neither division nor unity
    Matters. This is the land. We have our inheritance.

    This is Galiza y somos leales al Main

  397. Burnt Norton dixo...
  398. Al doblar la segunda escalinata por primera vez
    Me di vuelta y miré lo que había abajo,
    La misma forma serpenteante sobre el pasamanos
    Tras los vapores en el aire fétido,
    En pugna contra el diablo de las escaleras,
    Con su engañoso rostro de esperanza y desesperación.

    Al doblar la segunda escalinata por segunda vez
    Las dejé serpenteando y enrollándose ahí abajo;
    Ya no había más rostros, la escalera estaba oscura,
    Húmeda y escarpada, como la boca de algún viejo que babea sin remedio,
    O las fauces dentadas de un tiburón ya viejo.

    Al doblar la tercera escalinata por primera vez
    Había una ventana panzona como el fruto de la higuera
    Y detrás del espino florecido y de la escena pastoril
    Una figura de anchas espaldas ataviada en verde y en azul
    Hechizaba con una flauta antigua el mes de mayo.
    Son dulces los cabellos que se agitan, los cabellos castaños que ondean sobre la boca,
    Los cabellos violetas y castaños;
    La distracción, la música de la flauta, las pausas y los pasos de la mente en la tercera escalinata,
    Cada vez más se apagan; una fuerza mayor a la esperanza y a la desesperación
    Sube por la tercera escalinata.

    Main, yo no soy digno
    Main, yo no soy digno

    pero una palabra Tuya bastará.

    In Main We Trust

  399. Burnt Norton dixo...
  400. Quien caminaba entre el violeta y el violeta
    Quien caminaba entre
    Las varias gamas de variados verdes,
    De azul y blanco, con el color de María,
    Mientras hablaba de cosas triviales
    Sin saber y sabiendo sobre el dolor eterno
    Quien caminaba entre los otros mientras caminaban,
    Quien hizo que las fuentes brotaran vigorosas e hizo frescas las aguas de los manantiales

    Enfrió la piedra seca e hizo firme la arena
    Con el azul de los delfinios, el azul del color de María,
    Sovegna vos
    y lo de Yardley Gobion

    He aquí los años que andan entre medio, haciendo a un lado
    Los violines y las flautas, reinstaurando
    a una que se mueve en el tiempo entre el sueño y el despertar, vestida

    Con un manto de luz blanca, envuelto en la cabeza.
    Los años nuevos van, reinstaurando
    A través de una nube de lágrimas brillante, los años, reinstaurando
    Con versos nuevos una rima antigua. Redime
    El tiempo. Redime
    La visión no leída en el sueño más alto
    Mientras los unicornios enjoyados arrastran la carroza fúnebre dorada.

    La hermana silenciosa con su velo azul y blanco
    Entre los tejos, tras el dios del jardín,
    La de la flauta sin aliento, agachó la cabeza e hizo un gesto, pero no dijo nada

    Pero brotó la fuente y cantó el pájaro
    Redime el tiempo, redime el sueño,
    Muestra de la palabra nunca oída, nunca dicha,
    Hasta que el viento arranque mil murmullos del tejo

    Y después de este destierro.

    Pero redime la Anglogalician, redime

«A máis antiga ‹Máis antiga   1 – 200 de 324   Máis recente › A máis nova»

Publicar un comentario