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El gato sigue aún destripando en secreto al perro ocasional, arrancando cabezas de pollo de un mordisco

Osmundo B., autor pontevedrés, cosecha del 67, que cuenta sus lectores por cientos de miles, entrevista a Sergio Vidal (Pontevedra, 1982), el landlord-frontman del porcobravismo rampante.


Me reúno con Sergio un sábado a mediodía en el Bagos, un pequeño bistró del casco antiguo pontevedrés ideal para mantener una conversación tranquila con buen vino y viandas de calidad. Una ligera resaca de la noche anterior es el único pero, y mis facultades mentales no están en su momento de mayor plenitud, pero si el mundo fuera perfecto ya habría dejado de existir hace tiempo.


Sin más preámbulos, pedimos el vino (aquí no sirven cerveza) y el elegido es Gabacho, un tinto de la Rioja alavesa cuyo responsable, el francés Olivier Rivière, cruzó los Pirineos hace unos años para elaborar sus caldos con una buena dosis de ironía, como pone de manifiesto el nombre del producto. Buen comienzo.


Reconfortado el ánimo, entramos en materia. Para preparar nuestra charla me he leído varias entradas del blog y confieso que no he entendido ni la mitad, así que espero que Sergio me aclare algunas cosas.

¿Esto de la Anglogalician Cup va en serio o es una pachanga regada con grandes dosis de alcohol?
Va muy en serio, algunos duermen en camas hiperbáricas, otros se machacan en el gimnasio, otros intentamos, mediante una dieta equilibrada, preparar nuestros estómagos para la cantidad de alcohol con la que intentarán ahogarnos. Yo diría más, son los partidos mas importantes del año, todo lo que conlleva viajes, pubs, huérfanas y conciertos, son pequeños males necesarios.

Como ya hemos empezado en el lado equivocado de la Manche, seguimos ahondando en la herida. Llega nuestra terrine de foie. Sin palabras.


He visto algunas imágenes subidas de tono en el blog. ¿Hay algún componente carnal? (Es decir, ¿se folla?) Sé de más de uno que reactivaría sus maltrechas carnes para vivir unos últimos momentos de gloria.

Hay cuestiones de las que por contrato tenemos prohibido hablar. Hay que ser Porco en el campo y en la vida, después de todo nunca es bueno desvelar todas nuestras andanzas.
No obstante diré que seguramente alguno soñaría con dar su ultimo estertor con alguna huérfana... perdón quería decir en el partido .

Continuamos con una concesión a los ancestros, pulpo a la gallega, pero deconstruido según los principios de la nouvelle couisine. Espectacular.


Después de unas cuantas ediciones, la Anglogalician Cup parece consolidada. ¿Hay algún proyecto de ampliar la competición? ¿No estaría bien celebrar una especie de torneo cinco naciones con los adler germanos, los lupi transalpinos o los coqs galos, por ejemplo? Sería una especie de apocalipsis futbolístico-cervecero.

Bah, eso nunca podría ser, habría que mantener demasiado la compostura para que nadie resultase herido. Tú imagínate, gabachos!!! e italianos !!! Con los primeros habría que tener cuidado para no romperlos y total se acabarían rindiendo, y con los segundos sería jugar contra 7 como Lutzky, ajjaajaj. A mí personalmente contra los alemanes no tendría problema, gente seria joder, bebedores de cerveza.

Tempura de crevettes avec moutarde, un toque nipón para llegar al cielo.


Dejando a un lado las pasiones balompédicas, la única actividad de la Cup en la que he participado es el mítico concierto de la sala Karma el año pasado, donde pudimos asistir a la presentación de Castlevania, actualmente Tora! Tora! Tora! ¿Se va a repetir algo así en próximas ediciones? ¿Vais a componer un himno? No estaría mal para animar a la tropa.

Se repetirá eso seguro. De hecho ya se ha repetido en Sheffield y si todo avanza como hasta ahora, en octubre tendremos concierto. Lo del Himno yo casi pasaría más que nada por no ver como unos se ponen la mano en el pecho otros miran al cielo como Raúl y alguno que otro fijo que silba. Nuestro único himno es el "Anglogalician Cup nananana Anglogalician Cup nanana nanana", que es como el de la Champions, neutral y utilizado por los dos bandos.

Como traca final,  faux brouillé de morue, contundencia y delicadeza. Inapelable.


Por último, en una entrada del blog aparecen referencias a Beckett y Joyce, y ahí sí que me he perdido. ¿Me lo explicas?

Es un metacuento. Ahora, ahí que cada uno le dé la interpretación que quiera a la cuestión, lo que el Rodillarato oculta es la verdadera intención, la polémica por la polémica, a lo Salvame Deluxe, ataviados, eso sí, con un halo de misticismo y cultura. Bueno, más o menos un reflejo de lo que es la Cup.

Casi al límite, no podía faltar le fromage, aunque a Sergio le está vedado este placer.


Para rematar la faena nos faltaría la copa de cognac de rigor, pero un inoportuno ensayo de su grupo obliga a Sergio a salir corriendo. Tal vez sea mejor así, porque ya empezábamos a ponernos tiernos. Otra vez será...